No ha tardado en desatar las más variadas especulaciones la versión de que la Procuraduría General de la República buscaría un arreglo con el coronel Carlos Ramón Piccini Núñez a cambio de información sobre el préstamo por 94 millones de dólares para comprar los aviones Super Tucano.

El oficial, quien ya en una ocasión dijo que las autoridades saben a dónde tienen que dirigirse para aclarar todo lo relativo a la operación, no solo es el único que está preso, sino que se le considera una pieza clave para aclarar algunos aspectos.

Lo del acuerdo no está del todo claro, pues hay informaciones, como la supuesta sobrevaluación que según las propias autoridades consta en el expediente, que escapan a su incumbencia.

Tal vez Piccini Núñez puede cooperar en lo relativo al soborno de 3.5 millones de dólares que se habría repartido entre congresistas y otros funcionarios para la aprobación del contrato de préstamo. En todo caso, el Ministerio Público tendrá que explicarse.