Un obrero de la alcaldía derriba una banca ubicada en la acera en la calle Albert Thomas.
Desde el inicio de esta semana el ayuntamiento de la capital inició una batida en busca de recuperar los espacios públicos en manos de particulares, que se dicen “padres de familia”, y que loa usan para hacer todo tipo de negocios en detrimento de los peatones que encuentran por donde caminar o recrearse libremente.
El primero de estos operativos lo realizo La Dirección de Defensoría y Uso de Espacios Públicos de la Alcaldía del Distrito Nacional (ADN) que retiró decenas de vehículos en condición de chatarras y eliminó comercios que obstruían el paso de los peatones en Manganagua.
La intervención que se extendió a las calles Guacanagaríx, Santa Lucía y Teodoro Chassériau del citado sector capitaleño, persigue recuperar los espacios públicos, y garantizar una ciudad más segura, limpia y organizada, mejorando la calidad de vida de todos los ciudadanos y visitantes.
“Ya era justo que Carolina le meta mano a los vendedores, y casetas ilegales en las calles. Hay que ir detrás de los talleres y negocios que tienen las aceras para arreglar, construir o vender lo que sea sin importarle el peatón ni el vecino”, dijo Juan Francisco Rojas residente en Villas Agrícolas.
Operativo 2
En el día de ayer el ayuntamiento de la capital y la Dirección de Casinos y Juegos de Azar del Ministerio de Hacienda mediante una intervención, en donde acompañado con policías municipales y máquinas pesadas, clausuraron y demolieron dos bancas de apuestas en la avenida Albert Thomas.
Las bancas obstruían el paso peatonal, ya que se ubicaban de forma ilegal sobre las aceras y aparte de eso operaban sin licencia, y se encontraban en las cercanías de centros educativos, infringiendo normas sobre las buenas costumbres.
“Queremos que la alcaldesa haga con las aceras lo que ha hecho con los parques. Que lo recupere y que esté a disposición de la ciudadanía que es quien debe usarlo. Aquí hay calles sin aceras como lo está la avenida Ovando con Máximo Gómez”, dijo Mario Tavárez.
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Todo indica que estos operativos, eliminando chatarras, negocios ilegales y devolviendo espacios a los moradores seguirán de parte de la Alcaldía del Distrito Nacional y su alcaldesa Carolina Mejía, como parte de su compromiso con el desarrollo integral de Santo Domingo aportando un entorno más organizado y seguro.
Una necesidad
Las áreas verdes, parques, plazas y calles y aceras son vitales para la vida urbana, ya que son los espacios que proporcionan el lugar para el esparcimiento y que fomentan el hacer ejercicio, la interacción social y la vida comunitaria al través de actividades culturales, ferias y eventos.
Antecedentes
La ocupación de espacios públicos en el Distrito Nacional es un tema de índole socioeconómico muy complejo que refleja la diversidad, las tensiones y las necesidades de una ciudad en constante crecimiento donde la informalidad es la base del sustento de una gran parte de la población.
La ocupación de las aceras por parte de vendedores, talleres, comercios, tiendas, cafeterías, bancas, gomeras y todo tipo de negocios se ha convertido en una realidad cotidiana, desde hace décadas, en casi todas las calles y avenidas de los barrios de la ciudad capital.
Poner un negocio en plena acera, calle o área verde; o tener un pequeño o gran local y usar la acera o calzada como centro de operación (hacer las actividades propias de la pequeña empresa, taller o negocio) o parqueo sin tener en consideración la obstrucción de la vía es una violación frecuente y normal en el país.
Muchos de estos violadores de la ley o “padres de familias” expresan que sus actividades les permiten ganarse la vida y mantener sus familias, ya que venden servicios o mercancías a los ciudadanos a precios muy competitivos.
Conclusión
Seguir con la implementación de estrategias inclusivas y sostenibles que reconozcan los derechos de los ciudadanos a poder andar libremente podrá garantizar que la capital dominicana continúe transformándose un lugar vibrante, accesible y lleno de vida para todos.
Hay que liberar los espacios, poner controles para que no sigan las ocupaciones, pero también hay que registrar y regularizar a las personas que podrán operar cualquier tipo de negocio en una vía o espacio público.
La reubicación de los vendedores ambulantes usando el espacio público es una de las soluciones para organizar a estos trabajadores informales al tiempo que se le da orden al espacio público y se les convierte en contribuyentes.
Las autoridades locales deben regular la ocupación mediante campañas de reordenamiento urbano y la implementación de políticas para formalizar a los vendedores.
Recuperados
Además hay otros puntos que fueron recuperados en los sectores Villa Consuelo (metalera), Ensanche La Paz, Honduras y las avenidas José Martí y 27 de Febrero.
