Se encuentra en el país una de las barcazas que se pretende instalar en Azua, sin que aún se haya decidido el lugar exacto, ya que estudios ambientales han demostrado que en Puerto Viejo viven algunos manatíes.

La advertencia ha sido hecha al ministro de Medio Ambiente, el economista Miguel Ceara Hatton, pero parece que desde ese litoral no quieren enfrentar el problema.

Esta dejadez lo que hace es contribuir con ahondar el conflicto por la posible instalación de esas barcazas de generación eléctrica en la zona de amortiguamiento del área protegida Refugio de Vida Silvestre, Manglares de Puerto Viejo.

Tanto la Academia de Ciencias, ambientalistas y organizaciones civiles de Azua, insisten en las perturbaciones que causarán las barcazas a la biodiversidad de la zona, incluyendo a los manatíes. Además de otros impactos al turismo, la pesca y la agricultura.