Capotillo convertido en tierra santa

El dirigente deportivo Danny Pérez ha sido uno de los tantos preocupados por cambiar la percepción que tiene la gente sobre el ensanche de Capotillo.

Por mucho tiempo se ha relacionado al sector ubicado en la parte norte de la capital con la delincuencia, vandalismo y malas costumbres, sin embargo Pérez afirma que en los últimos años “Capotillo es tierra santa”.

“Cuando se habla de Capotillo se dicen cosas negativas pero muchas cosas han cambiado, fíjate que las huelgas ya no se sienten como antes”, señaló Pérez, quien explicó que todo ha ido cambiando desde la construcción de la escuela Salomé Ureña, en 2015.

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Desde la inauguración de dicho plantel educativo, el nacido y criado en Capotillo pensó en utilizar las canchas para formar una entidad que marcará la diferencia en su barrio a través del deporte, por lo cual creó el club Tierra Santa.

Peréz señaló que su misión es evitar que los niños y jóvenes del populoso sector se queden en las calles sin nada que hacer en sus tiempos libres.

“Desde que entraron en funcionamiento la escuela (Salomé Ureña) y el club (Tierra Santa) los niños ya no están pensando en estar en una esquina haciendo nada. Estamos haciendo un trabajo social para dirigir a los más jóvenes a que tengan un buen comportamiento a través del baloncesto y voleibol”, detalló el dilatado entrenador con unos 25 años de experiencia, quien manifestó que mediante estas actividades los menores no tienen oportunidad de pensar en andar en malos pasos.

Fútbol

Pérez reveló que en conjunto con Benny Metz, viceministro administrativo de la Presidencia, están trabajando en la conformación de una academia de fútbol, que llevaría por nombre Capotillo FC.

“No seremos sólo baloncesto y voleibol, también nos enfocaremos en el fútbol, como lo hemos hecho con la vitilla. De nuestro barrio pueden salir grandes talentos”, agregó.

En la actualidad Tierra Santa tiene en su matrícula un total de 150 niños y alrededor de 50 jóvenes, entre varones y hembras.

Señaló que gran parte de los pequeños llegaron solos al club o por vía de un amiguito, pero que para mantener el control, piden los números telefónicos de los padres para reunirse con ellos y recibir la autorización de ingreso.

Motivación

Sobre el trabajo realizado dijo sentirse satisfecho y orgulloso de contribuir de esa forma con su barriada.

“Me llena de emoción cuando veo a uno de estos jóvenes, que sale de aquí, destacándose en diferentes torneos”, indicó.

Para Pérez es de gran motivación enseñar a los jóvenes a temprana edad, señalando que mientras menos años tienen se puede trabajar con mayor énfasis en los fundamentos de las disciplinas deportivas y que también ayuda a la formación de las buenas costumbres.

“Este es mi bebé, mira como estamos en este sol dándole práctica a los niños y eso es algo que solo una gente que le guste lo hace”, expresó Danny.

Petición

El presidente del club Tierra Santa aprovechó la oportunidad para solicitarle al Ministerio de Deportes la construcción de gradas en la cancha las cuales no sólo servirían para albergar a la fanaticada que va a presenciar los partidos, sino que pueden ser utilizadas como espacio de almacenamiento y hasta de oficina.

“Próximamente haremos nuestro Séptimo Torneo Tierra Santa, y cada vez que vamos a realizar este evento, tenemos la problemática de que no tenemos dónde sentar a las personas y debemos solicitarle a la escuela que nos faciliten sillas, cuando ese problema se puede resolver con la construcción de gradas”, explicó Pérez, quien señaló que la solicitud ha sido realizada en diferentes ocasiones tanto al Ministerio de Educación como a la cartera de Deportes.

Donantes

Además de actividades deportivas, Tierra Santa está conformando un club de donantes de sangre, junto a la Cruz Roja, para beneficiar a los residentes y familiares del sector de Capotillo.