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Caso suspicaz

Caso suspicaz

La entrega a la Policía del sospechoso de cargar con 37.1 millones de pesos en efectivo de la sede de la Junta Municipal Electoral de Santiago no despeja el misterio que desde la sustracción y localización de la valija ha rodeado el caso.

La bolsa con el dinero, de la que según las autoridades solo faltaban 15 mil pesos, fue encontrada escondida en el techado del local que ocupa la entidad electoral.

Parece extraño que los investigadores no revisaran por completo las instalaciones y que un robo de una suma tan cuantiosa pudiera ser ejecutado por una sola persona, por demás un empleado de seguridad. Tras informarse que era perseguido, José Antonio Durán decidió entregarse ayer en el destacamento policial de Esperanza, Valverde.

Hay muchas incógnitas que tendrán que aclararse en torno a un robo que desde el primer momento el presidente de la oficina electoral de Santiago, Haime Thomás Frías Carela, asoció con un sabotaje contra las votaciones de ayer.

El dinero, que fue repuesto de inmediato por la Junta Central Electoral (JCE), sería utilizado para el pago de personal y la logística del proceso. Es obvio que las dudas tienen que aclararse.

El Nacional

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