Santo Domingo.-Las centrales sindicales del país conmemoraron este sábado el Día Internacional del Trabajo durante el cual exigieron una reforma urgente a la Ley de Seguridad Social, un incremento general de salarios de un 40 por ciento y una reforma fiscal que incluya a los que tienen que pagar más.
Las demandas están contenidas en sendos discursos pronunciados por Gabriel del Río Doñé, presidente de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC); Jacobo Ramos, de la Confederación Nacional de Trabajadores Dominicanos (CNTD) y Rafael Abreu, de la Confederación Nacional de la Unidad Sindical (CNUS).
Los tres líderes obreros hablaron en presencia del presidente Luis Abinader, la primera dama de la República, Raquel Arbaje; el ministro de Trabajo Luis Miguel De Camps y otros funcionarios del Gobierno, legisladores y representantes del sector empleador.
Reclamaron también el cese de las cancelaciones de empleados públicos y el pago de las prestaciones correspondientes a los que ya fueron despedidos.
Durante el acto, celebrado en la sede del Instituto Nacional de Formación Técnica Profesional (Infotep), Del Río Doñé reclamó que a 20 años de la entrada en vigencia de la Ley 87-07, sobre Seguridad Social, el República Dominicana no ha alcanzado la cobertura universal de la población, ni ha entrado en funcionamiento el primer nivel de atención. Tampoco ha entrado en vigencia el Plan Básico de Salud, entre otras tareas pendientes.
Sobre el salario, Jacobo Ramos dijo que los anuales niveles salariales no permiten a los trabajadores costear la canasta básica.
Abreu habló sobre la reforma fiscal y dijo que esta debe castigar la evasión y el fraude de los grupos financieros, industriales y empresariales, que incrementan sus riquezas en detrimento del bienestar de la mayoría de los dominicanos, que son los pobres.
