El exgeneral Salvador Lluberes Montás (Chinino), niega ordenar asesinato del periodista Orlando Martínez, ocurrido hace 41 años, el 17 de marzo de 1975, a las siete pm en la calle José Contreras casi Cristóbal de Llerena, cuando se dirigía a su residencia en la calle Antonio Maceo, luego de concluir su trabajo como director de la revista Ahora y autor de la columna Microscopio que publicaba diario en El Nacional.
En carta dirigida al suscrito, anexa, el ex general Lluberes Montás, afirma no ser el autor intelectual del asesinato de Orlando Martínez, con quien me vinculó una estrecha amistad de visitarlo en su residencia y él en la mía.
La versión socorrida desde un principio es que los jefes militares de entonces, almirante Ramón Emilio Jiménez Reyes, titular de las FFAA, mayor general Enrique Pérez y Pérez, jefe del Ejército, mayor general José Ernesto Cruz Brea, jefe de la Policía Nacional y comodoro Manuel Logroño Contín, jefe de la Marina de Guerra, sostuvieron una reunión en la sede de los institutos armados el 8 de marzo de 1975.
El propósito de la reunión de los más altos jefes militares de entonces se circunscribió a conocer un artículo publicado en El Nacional el 25 de febrero de 1975 por Orlando Martínez, anexo, en el que solicitaba al presidente Joaquín Balaguer marcharse del país, sugerencia que los altos mandos militares estimaron un desproporcionado atrevimiento que no debiera repetirse, acordando interceptar a Orlando y propinarle una paliza como método de escarmentar, no eliminar.
Fue el general Cruz Brea quien llevó y leyó el artículo de Orlando solicitando al presidente Balaguer marcharse del país, expresando al gobernante que esos términos no deben usarse con un Primer Mandatario, y el presidente Balaguer escuchó la exposición de Cruz Brea en silencio, que en ocasiones, como ésta, otorga.
Debe recordarse y consignarse que en esa fecha, el presidente Balaguer había consentido la formación de dos grupos militares aparentemente antagónicos, una pantomima, porque los dos eran puntales del gobernante y ambos acumulaban privilegios económicos tangibles, empero, el gobernante, guiado por el principio de Nicolás Maquiavelo de “divide y vencerás”, estimó que auspiciando una epidérmica confrontación en la cúpula castrense, introducía una cuña que evitaría una hipotética conspiración. Elemental.
Esos dos grupos militares estaban integrados por el almirante Jiménez Reyes, mayor general Pérez y Pérez, mayor general José Ernesto Cruz Brea, mayor general Lluberes Montás y comodoro Logroño Contín, el de menor peso específico, en los llamados “línea dura”.
El otro grupo lo componían el mayor general Neit Rafael Nivar Seijas, mayor general Marcos Antonio Jorge Moreno y mayor general Rafael de Jesús Checo, llamado Grupo de San Cristóbal, opuesto a métodos expeditivos, entendiendo no favorecían al gobernante.
Los jefes militares de la “línea dura” mencionados, reitero, en ningún momento consensuaron eliminar a Orlando, y conformaron un grupo de tarea para el efecto, integrado por el coronel paracaidista Isidoro Martínez, persona de confianza del general Lluberes Montás, que dirigió la operación, y que completaron el mayor Joaquín Pou Castro (Ñoñó), Freddy Lluberes y Emilio de la Cruz Veras.
El grupo interceptó a Orlando, que guiaba su carro Lancia azul, en la avenida José Contreras casi Cristóbal de Llerena en el área de la UASD, guiando el carro interceptor el coronel Isidoro Martínez, que chocó por detrás el carro de Orlando, que de inmediato, persona de valor comprobado, se detuvo, agachándose leve para asir la pistola que tenía en el piso del vehículo, abriendo la puerta con el arma en la mano derecha, momento en que Freddy Lluberes, experto tirador, le impactó con un tiro en el brazo izquierdo y otro, mortal, en el pómulo izquierdo, que ocasionó la muerta casi inmediata a Orlando, abandonando ipso facto la escena del crimen. Solo Freddy Lluberes disparó a Orlando. La pistola que portaba Orlando disponía de un formulario 25 concedido por el general Nivar Seijas.
Luego de transcurrir 25 años de iniciarse el juicio de fondo en 1997, finalmente en 1999 son condenados a 30 años de cárcel el general Lluberes Montás, Freddy Lluberes y el coronel Pou Castro.
El general Lluberes no asistió a juicio alegando quebrantos de próstata, del que fue intervenido posterior en Miami, Florida, y guardó reclusión por un breve tiempo en el pabellón de oficiales del Ministerio de Defensa. Reside en Casa de Campo.
En la nota endosada en este trabajo suscrita por el general Lluberes Montás, niega ser autor intelectual de la muerte de Orlando, porque la orden, no era eliminarlo, sino escarmentarlo, pero de ninguna manera la primera es aceptable, porque es inadmisible ese método de intimidación a la expresión del pensamiento, y la segunda, condenable.
Militó en el Partido Socialista Popular (PSP), presidido ad vitam por Narciso Issa Conde, quien llevó la acusación en los tribunales, innecesario por demás, porque el presidente Balaguer gobernó tres períodos más después de ese hecho de sangre.
