Como cada Domingo: Tarifa para la labor intelectua

El trabajo intelectual, es un trabajo. Hay gente que no lo cree. No se hace con una pala, un martillo o un hacha. No implica labores de albañilería o de construcción de vías públicas.  Es la intelectual, una labor que demanda estudios, conocimientos, prácticas de una vida informada, lecturas (muchas lecturas), pese a lo cual, los albañiles tienen un tarifario laboral y los escritores no.

Bien ha hecho la Unión de Escritores Dominicanos (UED)  al publicar un tarifario de servicios profesionales para escritores  tanto para el Estado como para entidades privadas.

La elaboración del tarifario fue fruto de una consulta realizada entre miembros de la organización y del consenso, tomando en cuenta la realidad económica y la infravaloración que se le da al trabajo intelectual en la República Dominicana.

El tarifario mínimo es el siguiente:

•       Conferencia magistral presencial (con investigación) 55 mil pesos.

•       Conferencia magistral en línea (apoyada en investigación) 50 mil.

•       Conferencia ordinaria, presencial: 35 mil pesos.

•       Conferencia ordinaria, en línea: 30 mil pesos.

•       Participación en panel (moderación y/o exposición) presencial: 25 mil pesos, por persona.

•       Participación en panel (moderación y/o exposición) en línea: 22 mil pesos, por persona.

•       Grabación en promoción, presencial: 20 mil pesos.

•       Grabación en promoción, en línea: 15 mil pesos.

•       Jurado en Premios Nacionales: 100 mil pesos por jurado.

•       Prólogos (dos a tres cuartillas) 20 mil pesos.

•       Estudios para obras literarias: 100 mil pesos.

•       Artículo para revistas especializadas (dos mil palabras o más): 10 mil  pesos.

•       Artículos (para periódicos o revistas generales): 15 mil pesos.

Notas:

1.    No están incluidos los gastos de logística (transporte, dieta, otros), cuando impliquen traslados.

2.    Todos los valores no incluyen impuestos, que deben ser agregados.

3.    La tarifa es revisable cada dos años para ajustes a la inflación.

Creo que faltó la revisión o corrección de textos para publicaciones (artículos, libros, etc), situación frecuente que sigue tras la frase amable: “Deseo que me leas esto…..”.