Tacito Perdomo
El delegado político del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) ante la Junta Central Electoral (JCE), Tácito Perdomo y el diputado de la Fuerza del Pueblo, Juan Quiñones, tildaron de abuso de poder la millonaria campaña publicitaria que mantiene Gonzalo Castillo en los medios de comunicación, a pesar de que no se ha hecho la proclama para iniciar la campaña presidencial.
Igualmente criticaron las promociones del Ministerio de Obras Públicas atribuyéndole los logros de la institución a Castillo en materia de construcciones públicas en medio de la campaña electoral.
“Eso es un abuso de poder de parte de él porque todavía no ha iniciado la campaña electoral y por otro una desidia de la Junta Central Electoral que es la llamada a hacer cu mplir la ley”, sostuvo Perdomo.
Agregó que “lamentablemente a la población no le queda más remedio que mostrar su inconformidad tanto en las elecciones del próximo 15 de marzo como en las del 17 de mayo próximo”.
Dijo que Castillo por ética personal no ha debido emprender la campaña a destiempo que ha iniciado en los medios de comunicación.
Quiñones
Mientras que Quiñones opinó que la actitud de Castillo y el PLD de iniciar la campaña presidencial antes de tiempo, es una muestra de la falta de institucionalidad que impera en República Dominicana. “Eso es un abuso de poder porque no se ha iniciado la campaña para las presidenciales y ya él hasta tiene un spot de más de tres minutos donde señala todas las obras que él señala, incluso algunas de los gobiernos de Leonel Fernández, que también se la atribuye a su gestión en Obras Públicas”, dijo el legislador opositor.
Añadió que “en vez de estar promoviendo sus aspiraciones a través de obras que realiza el gobierno, él lo que tiene que explicar cómo entregó los once mil 500 millones de pesos en asfalto y cómo se invirtieron los recursos en Punta Catalina que fue construida por la constructora brasileña Odebrecht”.
Dijo que el candidato presidencial del PLD quiere presentarse ahora como un gran gerente y que a cualquiera que le pongan en las manos más 300 mil millones pesos durante siete años para que lo gaste sin control, puede ser buen funcionario.
