Opinión Editorial

Contra el caos

Contra el caos

El tránsito es uno de los grandes dolores de cabeza con que diariamente tiene que lidiar la población como resultado, en gran medida, de la anarquía y la ausencia de autoridad. Que la circulación de vehículos haya desbordado la capacidad de las calles y de los espacios no es excusa frente a las frecuentes violaciones de las leyes en que incurren no solo motoristas, sino cualquier conductor.

Con la habilitación de 14 carriles en ese pandemonio que ha sido el kilómetro 9 de la autopista Duarte, el Ministerio de Obras Públicas hace una importante contribución para superar los atascos y agilizar el movimiento vehicular en toda la periferia.

Se trata de un aporte que no surtiría los efectos sino existe una coordinación entre todos los entes que tienen que ver con el tránsito.

Obras Públicas destinó 18 mil millones de pesos para solucionar un problema desafiante, además de revestir toda la periferia del esplendor que demanda una ciudad en expansión como Santo Domingo. Según el ministro Deligne Ascensión no solo se trató de adicionar más carriles para agilizar el tráfico, sino de contemplar todos los detalles para evitar percances.

Todo está muy bien y la vista no puede ser más preciosa. Pero el temor es que si Obras Públicas, el Ayuntamiento del Distrito Nacional, el Intrant y la Digesett no coordinan todo lo relativo a la circulación de vehículos por los nuevos carriles la inversión podría no tener los efectos deseados. Los conductores no pueden, como acostumbran, imponer sus leyes con la mayor impunidad.

Los estacionamientos en áreas prohibidas, las intervenciones discrecionales y otras prácticas tan comunes que fomentan el caos tendrán necesariamente que eliminarse para que el tráfico fluya con la rapidez y seguridad que amerita. Hay muchos males que pueden aliviarse si cada ente cumple, como lo ha hecho Obras Públicas con la habilitación de los carriles, con sus funciones. Todo el que sale a la calle sabe el problema que representa el tráfico.

El aporte de Obras Públicas se complementa con una eficaz articulación de todos los entes relacionados con el tránsito y el sector transporte.

El Nacional

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