De salud y otras cosas Opinión

Cosas de la calle

Cosas de la calle

César Mella

He notado la gran cantidad de adultos cojeando, es decir, gente que han sufrido lesiones en el pasado y han quedado con limitaciones permanentes.
2.- Las tres veces que me he montado en el metro de Santo Domingo me llama la atención ver a jóvenes conectados a un par de audífonos tal como ocurre en las grandes ciudades como New York.

3.- Los saludos manuales han evolucionado, por ejemplo ahora en vez de dar la mano, los varones se saludan chocando los puños cerrados.

4.- El guiñar un ojo; el “fui fuio” como pitido de galantería y el primero ,como gesto de coquetería, han desaparecido, más bien escuchamos el comentario de esquina “ viste a esa jeva, montro”.

5.- El que se cae entrando a un edificio o en la calle, producto de un resbalón ,lo primero que hace es pararse, sacudirse , mirar a ambos lados, reírse y asegurarse de que nadie lo ha visto y mucho menos acepta ayudas. ¿Cuantas fracturas óseas mal soldadas por hacernos los bravos deambulan por doquier?.

6.- Antes, al pasar el cortejo mortuorio, la gente cerraba las puertas y ocultaba los espejos, ritual que pretendía conseguir alejar la muerte de nuestro hogar. Creo que esa costumbre ha quedado relegada a campos lejanos.

7.- En estos días un prestante médico inauguró su consultorio y el sacerdote al expeler el agua bendita le deseó prosperidad a este ofertador de salud, lo que el no sabía, es que en horas de la tarde su suegra con incienso, agua y alimentos había llevado a un curioso para los despojos correspondientes.

8.- Los pedigüeños que encontramos en funerarias, canales de televisión y semáforos, han modificado sus técnicas. Antes era una receta (asuntos de salud) o la indicación de una prótesis.
Ahora o es con un haitianito de meses cargado y la mano en posición de plegaria o en el caso de los gordos y colorados dicen: “consígame un pasaje licenciado”.

9.- Ya limpiar el cristal de tu automóvil, sin tu autorización, es una agresión que ha traído muertos. Nos queda solo a veces, activar el limpia vidrio , oprimiendo el activador del agua y con todo y eso, te insultan.

10.- Así como la serenata de madrugadas es un ente en desaparición, el piropo poético y galante también. Se escuchan los halagos genealógicos:“ felicítame a tu madre por esa imponente arquitectura”.

Los imaginativos: “señorita no debió pedirme excusas por ocultarme con su bello rostro, recuerde que los ángeles no tienen espaldas” Eclesiásticos:Virgen solo quedan dos, Ud., por supuesto, y la Virgen de Altagracia…