El enfoque y asumir con responsabilidad las metas que se quieren lograr, teniendo en cuenta que todo se construye día a día, han sido parte de las claves para la permanencia del programa “En complicidad con Jacqueline Ramos” que llega a 16 años ininterrumpidos en el aire, junto a los 28 de su productora y conductora en el ejercicio de la comunicación.

“Es un trabajo que me enamora cada día más. Disfruto tener un espacio abierto a tantos profesionales y talentos que tienen la necesidad de compartir sus hazañas, poder aportar información a la sociedad dominicana.

Abrirme al aprendizaje en cada programa que realizamos y lo que pudiera ser más difícil, es lo que más disfruto, ser un ente multidisciplinaria para lograrlo: producirlo, conducirlo, ser minuciosa en la edición del producto final que sale al aire y otras muchas cosas”, dijo Ramos. “En Complicidad con Jacqueline Ramos”, que se transmite por SDTV, canal 24, los domingos a las 10 de la noche.

Ramos resalta que al ser titulada de periodista, en relaciones públicas, ambas disciplinas dan un resultado que se produce mediante un proceso de acciones que van marcando la trayectoria.

“Combino el informar analizando un tema nacional de forma estratégica y coherente al tiempo que propicio la cooperación con las organizaciones. Trabajo apegada a la verdad, soy fiel a mis principios y practico la humildad. He asumido mi rol en la sociedad como un sacerdocio, manteniéndome firme en aspirar ser, un referente para esa nueva generación que viene detrás”.

El camino recorrido

Jacqueline Ramos fue editora de espectáculo y sociales en la desaparecida revista “Portada Nacional”, luego pasé a la televisión con el mismo cargo, en el programa “Hora de Te”, desde el año 2005 inicia su programa. Laboró en la Lotería Nacional por unos 11 años aproximadamente, luego fue trasladada al Instituto Nacional de Administración Pública (INAP), donde labora aún.

Uno de sus mayores retos fue dirigir la Asociación Dominicana de Cronistas Sociales, donde dice llegó de manera fortuita y comprometida porque asumía dirigir un gremio de profesionales, calificados, y con vasta experiencia y trayectoria ejemplar, por lo que trabajó desde el reconocimiento y respeto a cada miembros, y dejándose asesorar.