
Sabina Villagra, curadora de la exposición; Sandra Winkler, embajadora de Argentina en RD; el ministro de Cultura, Roberto Ángel Salcedo, Johanna Peña y Marinella Sallent.
Desde Argentina ha viajado la exposición “El mundo según Mafalda”, una muestra que está disponible hasta el 31 de este mes en la Galería Nacional del Palacio de Bellas Artes, permitiendo al visitante sumergirse en el universo del humorista gráfico e historietista argentino, Joaquín Salvador Lavado, conocido como Quino.
“Los problemas siguen siendo los mismos”, dice la curadora de la exposición, Sabina Villagra.


“Las preocupaciones, las apiraciones, siguen siendo eso muy importante, y creo que dentro de 30 años va a seguir pasando”, resaltó explicando la importancia de El mundo según Mafalda, una exhibición que busca rememorar la obra del caricaturista argentino de la manera más fidedigna posible.
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Villagra dijo que el objetivo de la obra es recordar a quienes ya conocen a la pícara niña, y dar a conocer a las nuevas generaciones las reflexiones que ella desde la cotidianidad en su casa, con su madre o con sus amigos, hacía para tratar de explicarse por qué las cosas eran como eran a su alrededor, así como el meollo principal de los problemas “serios” que ocurrían en el mundo, de los que, dicho sea de paso, se enteraba a través de los noticiarios.


La muestra, que cuenta con la producción de Almas Producciones y Covi Entertainment, con la colaboración de la Embajada de la República de Argentina, ofrece una gran experiencia visual que incluye una réplica del departamento de los vecinos de la familia de Mafalda, con muebles y objetos de la década del 60 y comienzos de los 70. Asimismo, pasillos con paneles con las biografías de los personajes que revelan las características de cada uno de ellos, así como de Quino, presentado a través de una biografía muy original realizada por su amigo el humorista gráfico Miguel Rep.
Finalmente, dijo que la exposición nace en un museo para niños. “La idea era contarle a los chicos sobre este personaje de la década de los 60; su visión, todo lo que sigue aportando pese de que hace tantos años Quino la dibujó”.
Lo que no se esperaban, aunque no fue ilógico, es que al poco tiempo de inaugurarse prácticamente se convirtió en una muestra para adultos. “No hay edad para visitar esta exposición”, afirmó Sabina.
Este personaje, convertido en la tira de cómica de más éxito de la historia en lengua española se dejó de publicar en 1973, pero sigue igual de vigente desde entonces y ha acompañado a millones de lectores a lo largo de más de cinco décadas.