José Martínez Brito, al centro, junto al grupo de empresarios artísticos que piden reconsiderar medida.
Ante la reciente prohibición del Gobierno de las festividades públicas y privadas en playas del país durante Semana Santa, productores y empresarios artísticos, solicitan reconsiderar esta medida que afecta gravemente sus actividades planificadas para la temporada.
Catalogaron la medida de discriminatoria, clasista, arbitraria y atentatoria al derecho a la libre empresa.
Decenas de artistas y cientos de técnicos, quienes han invertido tiempo y recursos en la preparación de eventos desde hace varias semanas, se han visto sorprendidos por la decisión gubernamental.
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Según estimaciones del sector, la inversión total realizada hasta el momento asciende a más de 200 millones de pesos.
En la conferencia de prensa, realizada en Casa Vera, los empresarios se comprometieron a colaborar con las autoridades para garantizar que los eventos se lleven a cabo de manera segura.