Si no es víctima de otra conspiración, el presidente de la Cámara de Cuentas, Janel Ramírez Sánchez, tendrá que revisar su estilo de trabajo para mejorar su imagen.
Tras una sorpresiva visita a la sede de la entidad de la jefa del Ministerio Público, Miriam Germán, y su adjunta Yeni Berenice Reynoso, ahora ha trascendido que Ramírez Sánchez retiene 12 auditorías que han debido ser remitidas a la Pepca (Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa).
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Sus antiguos rivales en la entidad no han tardado en asomar la cabeza para criticar su estilo de trabajo e incluso las supuestas auditorías en las que se han detectado irregularidades. La visita de Germán, acompañada de Yeni Berenice, por lo menos se presta a conjeturas.
Es obvio que algo querían saber las magistradas. Desde que asumió el cargo Ramírez Sánchez ha tenido que lidiar con acusaciones y conflictos con la vicepresidenta Elsa Catano Ramírez, la secretaria Tomasina Tolentino de Makenzie y la miembro Elsa Peña Peña.
Las auditorías que supuestamente no han sido remitidas a la Pepca estarían relacionadas con los Ministerios de Educación, Relaciones Exteriores, Hacienda e Industria y Comercio, así como con el cabildo de Santiago, la Dirección de Aduanas y el Gabinete de Cooperación de Política Social, entre otras.
Los indicios son de que alrededor de Ramírez Sánchez algo se mueve.