Ejercicio de perdón

Mary Leisy Hernandez
Marilei@hotmail.com

Duele, sé que te duele que con la libertad de jóvenes como tú se juegue, como jugaban a las comadres las niñas, con muñecas y juguetitos de plástico.

A pesar de tu dolor, del mío y de los que te aman y aman la justicia, me atrevo a pedir que practiquemos ejercicios de perdón. Hagamos fluir la amorosidad, para que tanta podredumbre no nos enferme.

Sé que puedes tener muchos motivos para tener rabia y rencor, que te usaron como instrumento para satisfacer egos, para ganar y ganar. No saben que a veces ganando se pierde y perdiendo se gana, que las falsas imágenes no son eternas. En tu encierro te invito a practicar el perdón. No te dejes arrastrar por los que no saben de compasión.

Practica la paciencia, persistencia. Que no te contaminen los que construyen su éxito a fuerza del dolor ajeno.

Yo siento tanto impotencia y decepción como tú. Es más difícil estar preso cuando se tiene tantos sueños, cuando se ha dedicado lo que se tiene de vida a construir a base de estudio y trabajo esos sueños.

Es más duro estar encarcelado cuando están al alcance de todos, las pruebas de que eres inocente. A pesar de cualquier pesar insisto: practiquemos ejercicios de perdón. La vida se encarga de poner cada cosa en su buen lugar. Ora en tu soledad. Medita, viaja por dentro y descubrirás un universo.

Mi querido Odalis Ledesma: imagino que como yo te preguntarás: ¿cómo duermen? Violentaron fundamentos legales para condenarte y encarcelarte.

¿Creen estar libres de ser tocados por la justicia divina? Mejor no urgar en la mente de otros. Alégrate de no sentir la indiferencia que viven. Pide a Dios que les perdone y confía en que esta decisión será revocada. Se impondrá la justicia!