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Escenarios procesales

Escenarios procesales

Evelyn Torres

Es conocido por todos que, el convencimiento de los juzgadores se logra mediante la actividad probatoria desplegada durante el proceso, teniendo las partes la obligación de obtener y ofertar todos los elementos que de manera legal hayan sido obtenidos y que puedan sustentar la postura procesal fijada ante el juzgador, noción general de actividad probatoria que aplica para todos los procesos, sin importar su naturaleza, más en la materia penal arrecian las exigencias de validez de los elementos aportados.

A partir del interés oficioso de la Procuraduría General de la República en la investigación de casos de corrupción administrativa-así los denominan- hemos sido testigos de despliegues probatorios en los que se pretende sustentar dichos procesos, creando la casi certera impresión de que el desenlace de estos favorecerá a la investigación agotada.

El primer filtro que debe superar la actividad probatoria agotada durante la investigación es la denominada etapa preliminar, en donde todas y cada una de las pruebas son sometidas a un debate técnico centrado enla legalidad, pertinencia, suficiencia y vinculación de las pruebas, tanto con los hechos como con los imputados, filtro en el cual queda excluida una gran cantidad de pruebas, superando esta etapa únicamente aquellas en las que pueda fundamentarse una sentencia condenatoria; al menos eso dice la ley.

Amparados en lo anterior, tenemos dos escenarios procesales, el primero es la posibilidad de que sea dictado un auto de no ha lugar en beneficio de los encartados o de algunos de ellos y el segundo, que sea dispuesta su remisión a juicio, situación en la cual debería ser casi segurauna condena, pero la verdad es que en nuestras actuales incidencias procesales no sucede ni una ni otra.

El ejemplo más reciente de lo que referimos es el resultado del juicio de la llamada Operación 13. Ante el tribunal de juiciose presentó un escenario compuesto por acuerdos a los que arribaron algunos imputados con el ministerio público, así como encartados que supuestamente debían ser condenados porque, conforme la glosa procesal, la acusación estaba respaldada por una gran cantidad de pruebas; sin embargo, el desenlace se apartó totalmente de lo esperado.

Es cierto que en las acusaciones de la naturaleza de todas las operaciones, se aportan muchos “medios de prueba”, muchos, decenas de miles para ser exactos, pero la experiencia actual se orienta a que no es sólo la cantidad de “pruebas” lo que determina la culpabilidad de cualquier ciudadano, sino que, junto a otras exigencias legales, la calidad de estas es determinante para la comprobación de lo alegado, lo que demuestra que no siempre mucho es bueno.

Por: Evelyn Torres

evelyntorres@gmail.com

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