¿Qué Pasa? Arte Nacional

Esperando al tren que pasó

Esperando al tren que pasó

Joseph Cáceres

Parodiando el lenguaje coloquial, los que como yo, somos P.M. (pasado meridiano), la vida nos ha dado la oportunidad de conocer los más importantes formatos musicales.

Los  discos de vinilo que se reproducen a distintas  velocidades o RPM: 45, 33 1/3, 12, 7.l.

Las cintas, los casetes, los discos compactos (CD), hasta llegar a la música digital que se almacena en memorias o en las nubes, con la Internet.

Lo único que me faltó experimentar fue la “vitrola”, pero eso hay que dejárselo a mis abuelos… uno no puede abarcar tanto.

Todo esto viene a cuento, a propósito de que todavía, a esta fecha, hay artistas que se han quedando “en Belén con los pastores”, rumiando viejas hazanas y rememorando añejos logros, sin parar mientes en que el tren pasó hace tiempo, y ellos siguen parados en la estación, con su boleto de viaje en la mano.

Los tiempos han cambiado, y tienen que entender que  no hay casas discográficas, como antes. Que las principales estaciones de radio prefieren ser interactivas, y no musicales; que la audiencia se ha diversificado con la salsa, la bachata, y lo urbano, y  no solo es merengue.

Que las herramientas de promoción son diferentes, como Spotify.

Pero, siguen parados en la estación del tiempo, esperando un tren que ya pasó.