Una mujer de apenas 20 años de edad se ha convertido en la nueva víctima de la epidemia de los feminicidios en el país.

Doralba Dorine Peralta, quien residía en La Canela, Santiago, fue ultimada por su expareja José Diloné Ventura, de 21, con quien había procreado una hija. Diloné decidió suicidarse después del crimen.

Cada feminicidio pone de manifiesto la presencia del machismo en la sociedad y se con vierte en un desafío para las autoridades.

El suceso es parte de una ola de violencia registrada en estos días de la que han sido víctimas varias mujeres.

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A pesar de que según los familiares la mujer, que trabajaba en una banca de lotería, era amenazada por su expareja, decidió no buscar protección de las autoridades.

Es un detalle que entre muchos otros deben ponderarse para ejecutar con más eficacia una política que por lo menos reduzca los feminicidios.