Editorial

Halar la cuerda

Halar la cuerda

El Gobierno acogió ayer un paquete de propuestas sugeridas por sectores vinculados a la industria, comercio y producción agropecuaria para contrarrestar alzas de precios en alimentos y bienes esenciales, lo que constituye una edificante experiencia sobre cooperación público-privada para afrontar dificultades derivadas de la crisis pandémica.

Una mesa de trabajo integrada también por representantes de los sectores social y laboral entregó a las autoridades el conjunto de sugerencias, la mayoría de las cuales fueron acogidas con promesa de aplicación inmediata o en el corto plazo.

Entre esas iniciativas figura la coordinación de un programa entre Banco Agrícola, Instituto de Recursos Hidráulicos (Indrhi) e Instituto Agrario Dominicano (IAD) para promover siembra de productos de ciclo corto, además de la extensión de los mercados de Inespre para garantizar venta directa de productos básicos sin intermediarios.

La Dirección de Aduanas dispondría de facilidades crediticias por dos mil millones de pesos en favor de importadores de productos e insumos agropecuarios vinculados a la canasta básica, cuyas cartas de crédito serán gestionadas por el Banco de Reservas.

Aunque materias primas como maíz, trigo y soya experimentan moderadas reducciones de precios en mercados internacionales, no se reflejan de manera inmediata en el mercado interno, en razón de que industriales, comerciantes y productores operan con inventarios adquiridos a precios anteriores.

Esos esfuerzos conjuntos son trascendentes porque se ha procurado elaborar una receta netamente nacional para contener los preocupantes niveles de inflación, como lo es la ampliación de la oferta de medicamentos con la inyección de 1,142 millones de pesos al programa Promese.

Se definen como muy importantes y oportunas los aportes acordados por el sector industrial, de ofrecer un 15% de descuento en la comercialización de 1.2 millones de fundas de cemento hasta el 31 de diciembre, además de reducir en la misma proporción, pero de manera gradual, los precios de las tuberías PVC.

Esas medidas y la promesa de reducir en un 8% los precios de las varillas y el acero y de garantizar que se aplicaría en la madera las reducciones que se experimenten en el mercado internacional, ayudarían a reactivar la industria de la construcción. La población espera ahora que se pase del dicho al hecho.

El Nacional

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