Este es el país que más pesado ha cargado con la presencia de haitianos indocumentados, pero al mismo tiempo ha sido el más respetuoso de su condición humana en los procesos de repatriación. Ni siquiera en la peor de las circunstancias los indocumentados haitianos han recibido un trato tan cruel y humillante como el proporcionado por Estados Unidos a los haitianos detenidos en Texas.
Cientos de ilegales son repatriados diariamente, pero el director de Migración, Enrique García, se ha ocupado de que el proceso se ejecute con el mayor apego a la dignidad humana.
Son transportados en autobuses e incluso garantizándoles sus pertenencias. García ha recibido presiones y ha sido víctima de campañas, pero tras los indignantes incidentes de Texas se tiene que reconocer el respeto con que el Gobierno ha tratado a los ilegales haitianos aquí.
