La proclamación de la independencia nacional, de la cual se conmemora hoy el 178 aniversario, es desde el primer día el acontecimiento patrio más trascendental de República Dominicana.
Gracias a la lucha titánica de los fundadores los dominicanos cuentan con una nación libre y soberana.
En cada aniversario hay que resaltar que la independencia no fue de los 22 años de ocupación haitiana, sino, como proclamó el patricio Juan Pablo Duarte, de toda potencia extranjera.
Después de enarbolar la bandera nacional hubo que reafirmar la independencia enfrentando con valentía y espíritu patriótico incursiones militares haitianas, pero también la anexión a España protagonizada por el traidor de Pedro Santana.
Esta celebración encuentra un país más apegado a sus símbolos patrios, más identificado con sus raíces y más comprometido con la libertad y soberanía. Pero todavía existe una gran deuda con los ideales de los fundadores, quienes, sin abrigar odio, también lucharon por respeto y justicia social.
La soberana responsabilidad de gobernantes y gobernados es construir una República Dominicana que sea digna del sacrificio de sus progenitores.
En este 178 aniversario, como en otros años, se impone como bandera combatir la corrupción, las desigualdades, la pobreza y todas las lacras que lastran el desarrollo, mientras se reivindican la justicia, la soberanía, la libertad y otros principios.
