Con condiciones tan propicias para los infartos como las que provocan la intensa ola de calor, las tensiones y la obesidad, las consecuencias, según el cardiólogo Pedro Ureña, se agravan por la falta de una red que enfrente a tiempo y con medicamentos los fallos cardíacos.

Además de orientación para prevenir las crisis es importante la creación de una estructura como la sugerida por el especialista para lidiar con los problemas cardíacos.

Ureña, director de Medicina Cardiovascular Asociada, considerada fundamental la red organizada, partiendo de que el infarto es una entidad que requiere una atención temprana.

Citó a manera de ejemplo que la mayoría de los pacientes por infartos llegan tarde a los centros, cuando ya existe un daño. La observación del profesional es para que se tome en cuenta para mitigar los daños de los infartos.