Muchos ciudadanos se quejan por la alegada "apatía de las autoridades" ante el incremento desproporcionado de los productos de la canasta familiar. / Fuente externa
Santo Domingo.-La inflación y el alto costo de la vida constituye un grave problema para la mayoría de dominicanos, que tienen que resolver su día a día con un limitado presupuesto, que solo alcanza para resolver las necesidades básicas.
El salario mínimo en el país es apenas de unos 20 mil pesos (el de mayor rango), cuando una familia de cinco miembros necesita, al menos, dos mil pesos diario para resolver sus necesidades básicas.
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“En 1980 se comía una semana con 100 pesos, y ahora en 2022 con mil no se puede resolver el día a día. Es una situación crítica la que estamos viviendo, porque al Gobierno, al parecer, no le importa que la gente coma o no”, dijo Marcela Brazobán, residente en Punta, de Villa Mella.
Dijo que en su casa viven cinco personas, y que solo en la cena se gastan hasta 300 pesos, sin contar lo del desayuno y la comida principal.
“Si contamos también el desayuno y la comida del mediodía, gastamos hasta dos mil pesos, con lo que usamos para ir al trabajo y regresar”, dijo Brazobán.
Muchos ciudadanos se quejan por la alegada “apatía de las autoridades” ante el incremento desproporcionado de los productos de la canasta familiar, entre los que figuran el arroz, el aceite, carnes, bacalao y otros artículos, como consecuencia de la inflación.
A dichos aumentos se suma el alza de los combustibles, que incluye el Gas Licuado de Petróleo (GLP), que se utiliza para cocinar y en el transporte público.
“Las autoridades tienen que poner atención a eso, porque la situación no está fácil, ya que el salario se ha reducido a menos de la mitad, debido a la inflación”, opinó el obrero José Francisco.
Aseguró que solo en gas, las familias están gastando el doble de lo que se necesitaba hace más de un año para adquirir dicho carburante, que se vende a 146 pesos.
