La deficiencia que se atribuye a la Policía en la preservación del orden público y la seguridad ciudadana contrasta con su desempeño administrativo. En el ranking de las instituciones públicas con mejor desempeño que elabora el Ministerio de Administración Pública, la Policía aparece en primer lugar.

Después que se criticó la desorganización interna, es obvio que la Policía se ha ocupado de ordenar sus trámites internos y controlar sus recursos.

En una entidad tan compleja, donde la jerarquía ha estado por encima de los procedimientos, la puntuación de un 93.82% que obtuvo habla bien de sus esfuerzos por lo menos en el renglón administrativo.

Es significativo que en la evaluación la Policía superó a la Dirección de Contabilidad Gubernamental, 93.49%; Tesorería Nacional, 93.27; Instituto Tecnológico de las Américas, 93.14, y Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña, 92.94.

La mejoría constituye un buen paso en el proceso de reforma para profesionalizar y modernizar una de las entidades más mal vistas por la población. Si es el camino que se han propuesto sus autoridades, se trata de una vía que merece trillarse.