HOUSTON. Ramón Laureano se estableció muy pronto como el punto focal de la victoria 4-3 de los Atléticos sobre los Astros en 11 entradas anoche en el Minute Maid Park. Solo tomó un tiempo determinar si iba a ser recordado como la razón por la que ganaron, o por la que perdieron.

Afortunadamente para un equipo de Atléticos que no había ganado en Houston en 2019 en cuatro intentos, los actos heroicos de Laureano eclipsaron cualquier deficiencia anterior. Él aportó un doble clave contra Collin McHugh en la 11ma entrada, empujando la carrera ganadora, lo que emparejó a la serie 1-1 rumbo al final del juego.

“Es un luchador”, dijo el manager de los Atléticos, Bob Melvin, sobre Laureano. “ Por lo bien que jugó la semana pasada y la noche anterior, esta noche, sus turnos al bate no fueron tan buenos como lo fueron hasta que realmente lo necesitó. Esafue la clave”.

El marcador estaba anudado a tres en el 11mo cuando Matt Olson -quien colocó a los Atléticos delante por primera vez en la novena con un jonrón de tres carreras contra Roberto Osuna- conectó un sencillo de un out. Mark Canha caminó y Laureano pegó un doble en la línea del jardín izquierdo, que remolcó a Olson (y, brevemente, Canha, hasta que fue enviado de regreso a la tercera posición después de que una revisión del jefe de equipo determinó que la bola de Laureano se había alojado debajo del muro del campo izquierdo).

“Solo estaba tratando de golpear un rodado a la segunda base”, dijo Laureano. “No funcionó tan bien. Al final, solo intenta ralentizar el juego. Solo siente mi cuerpo flotando y simplemente reaccionar”.

También confió en los instintos antes en el juego, pero los resultados fueron menos satisfactorios y, por un momento, pareció que su decisión en una fracción de segundo podría haber contribuido a una derrota de los Atléticos.

En la segunda entrada, Yuli Gurriel pegó una línea bajita por el centro, pero terminó con un jonrón dentro del parque cuando la decisión de Laureano de lanzarse hacia adelante en una zambullida salió por la culata.

Cuando Laureano intentó la atrapada deslizándose, la pelota cortó a su derecha y rebotó debajo de su guante. El veloz jardinero recuperó el balón en la pared en la parte más profunda del centro y recuperó la bola rápidamente, pero el tiro de relevo estuvo fuera de línea y Gurriel anotó con facilidad.

El dato

Bob Melvin

El Mánager de los Atléticos dijo que Laureano “Nunca se va a deprimir, nunca va a fallar porque le tenga miedo a algo