TAMPA.– Las Reglas Joba están muertas. Los Yankees están considerando seriamente a Luis Gil como el quinto abridor en abrir la temporada, sin restricciones de entradas.

Aunque lanzó cuatro entradas en ligas menores la temporada pasada después de una cirugía Tommy John. Y 134 ¹/3 entradas de béisbol profesional afiliado desde 2020. Y el récord de su carrera fue 96 entradas en 2019.

“Creo que tenemos una mejor manera de determinar cómo está progresando un lanzador que simplemente establecer un número arbitrario”, dijo el entrenador de lanzadores Matt Blake.

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Comenzando realmente con Joba Chamberlain y basándose en algunos estudios, pero principalmente en sentimientos e intuición, los Yankees (y muchos en la industria) estaban limitando el conteo de lanzamientos y las entradas.

Pero Blake destacó todas las herramientas que existen ahora para medir la fuerza y la flexibilidad entre aperturas y si un lanzador, por ejemplo, baja el ángulo de su brazo durante un juego, como una forma de evaluar las señales de alerta.

El año pasado, por ejemplo, se esperaba que Clarke Schmidt tuviera que cerrar en algún momento. En cambio, mientras estableció récords profesionales en aperturas (32) y entradas (159), los Yankees no vieron pérdida de agilidad, fuerza o forma de lanzamiento y simplemente lo dejaron seguir adelante.

Creen que mantener a un lanzador en un patrón de uso constante en realidad ayuda en lugar de fluctuar para subir, bajar y avanzar y retroceder lo que se le pide al brazo.

Entonces, los días de conjeturas sobre el aumento de la carga de trabajo en 30 entradas a la vez o en un 25 por ciento o lo que fuera el cálculo se están desvaneciendo hacia la modernidad. Y Gil ha estado a la altura del desafío.

De hecho, los Yankees lo sacaron del campamento a principios de este mes. Sin embargo, como dijo Blake, “es un candidato muy serio” para el puesto número 5.

Joel Sherman
New York Post