¿Qué Pasa?

Matrimonio simbólico gana popularidad

Matrimonio simbólico gana popularidad

Llovieron las críticas cuando la actriz Irina Baeva confesó que se había casado en una boda simbólica con Gabriel Soto.

Cuando la conocida actriz rusa Irina Baeva, luego de que terminara su relación con el también actor Gabriel Soto, confesó que se habían casado en una boda simbólica en Acapulco, abundaron los cuestionamientos a esta ceremonia, en la que se critica aún su validez ante la sociedad.

 Y es que una boda simbólica no implica el valor legal de firmar un documento, ni padres religiosos, ni jueces. Tampoco incluye los esquemas tradicionales de un matrimonio. Es más bien un momento especial creado por los novios, en el que ante personas de su círculo íntimo, son testigos de su promesa de amarse, estar juntos y tener una vida en común.

 Y, aunque usted no lo crea, este tipo de ceremonias no es tan escasa como se piensa. Ya la han hecho celebridades de la talla de George Clooney y Beto Cuevas, y en RD muchas parejas han optado por la misma a tal punto que se ofrecen los mejores servicios para armarla, al gusto de la pareja interesada.

 Irina contó que ella y Gabriel habían hecho una boda espiritual, porque se sentían comprometidos con su relación y convencidos de que querían seguir juntos. Lamentablemente a las pocas semanas terminaron.

 Julissa Villar, de la empresa Armony Música & Ceremonia, quien ha organizado ceremonias de este tipo, tanto en RD como en otros países, sostiene que las ceremonias simbólicas están ganando popularidad, permitiendo a las parejas diseñar una celebración completamente personalizada y única.

A la pregunta de quiénes optan por este tipo de ceremonias, explica que son ideales para varios públicos, pero es más común en clase media o clase media alta.

Detalla que hay muchas personas que se casan fuera del país, pero quieren tener una celebración de bodas con su familia y amigos en la República Dominicana, por lo que hacen una ceremonia simbólica, aunque legalmente ya estén casados.

 “Otro público es aquellos que se casaron legalmente sin una celebración y que ahora quieren celebrar junto a su familia y optan por este tipo de ceremonia. También para aquellas parejas que no quieren una ceremonia tan estructurada como  las legales y quieren algo más romántico y personalizado, donde se incorporen ritos e incluso tenga algún toque religioso o espiritual”, expresó.

 Aunque no tienen estadísticas de la cantidad, explicó que en su caso tienen un promedio una a dos ceremonias simbólicas cada fin de semana. Llegando incluso a tener hasta cuatro en un solo fin de semana.

“La celebración cuenta con un programa estructurado desde cero totalmente personalizado para los novios, donde se incluyen elementos esenciales como una lectura bíblica, un poema, algo relacionado al matrimonio o al amor. El intercambio de votos y anillos. Y siempre sugerimos incluir algún ritual o símbolo que represente la unidad de los esposos como el ritual de las monedas, de la arena, de la caja de vino, entre otros”.

 Agregó que se incluyen firmas simbólicas y se pueden incluir palabras de familiares o amigos. «Una ceremonia simbólica ofrece una libertad creativa que no siempre es posible en las ceremonias tradicionales,» comenta Villar, oficiante de ceremonias simbólicas y CEO de Armony música & ceremonia.

 Este tipo de ceremonias no está limitada por tradiciones religiosas o legales, lo que ofrece a las parejas la libertad de crear una celebración que realmente represente sus valores, creencias y deseos, ya sea incorporando elementos culturales, religiosos, lecturas significativas o rituales personalizados como la unión de la arena, el rito de la luz, la colocación del rosario o del lazo, el atado de las manos, etc.

De eso se encarga Armony Música & Ceremonia, una empresa especializada en la planificación de ceremonias católicas y civiles, ofreciendo servicios de música para bodas, eventos sociales y corporativos, así como la celebración de ceremonias simbólicas en español e inglés.

«Una ceremonia simbólica ofrece una libertad creativa que no siempre es posible en las ceremonias tradicionales», comenta  Villar, quien invita a obtener más datos en sus redes @ArmonyMusicayCeremonia, correo electrónico  info@armonybodasyeventos.com

Otros ejemplos

El artista internacional Beto Cuevas se casó en el año 2001 con su novia Estela Mora en una ceremonia de inspiración Pehuenche. Fue una ceremonia simbólica oficiada por el estilista Francisco Llancaqueo, quien fue reconocido como chamán por una machi hace varios años. Fue en medio de un círculo protector de sal y velas, quema de canela y música tradicional mapuche.

George Clooney y Amal Alamuddin celebraron una ostentosa boda simbólica en Venecia. Fueron cuatro días de celebraciones en la ciudad italiana, que incluyó paseos en bote, despedidas de solteros, lujosos hoteles, restaurantes y resorts, e invitados de la talla de Cindy Crowford, Matt Damon, Bill Murray, Emily Blunt, Bono, entre otros.

Para la ceremonia en sí, los novios se tomaron de las manos y leyeron los votos de matrimonio escritos por ellos mismos, rodeados de flores y frente a todos sus invitados. Poco después de esta ceremonia simbólica, legalizaron civilmente el vínculo.

Opción para parejas LGBTIQ

 A la espera de que el matrimonio igualitario sea reconocido en sus países de origen, cientos de parejas LGBTIQ están organizando ceremonias que, aunque no tienen validez legal, se han convertido en una buena opción para validar su unión y reivindicar su lucha.