Por la trascendencia de la justicia como soporte del sistema democrático es altamente significativa la mejoría de que se ha dado cuenta en ese poder del Estado.

El presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis Henry Molina, informó que la mora, que tradicionalmente ha sido una de las principales quejas, se ha reducido prácticamente a cero. Siempre se ha dicho que justicia demorada es lo mismo que justicia denegada.

En el proceso de institucionalidad que vive el país, la justicia, por demás esencial para la seguridad, no podía quedarse atrás. Aunque sea mucho lo que se ha avanzado, la justicia tiene que superar los lastres del pasado.

Sin una justicia eficiente la ciudadanía ni los inversionistas consideran garantizados sus derechos. Mientras más se avance en la mejoría del sistema judicial, más confianza se tendrá en el país en esta etapa de competitividad.