Santo Domingo.- La realización de Santo Domingo Invita implicó un avance profesional para la producción televisiva dominicana por los criterios que debió adoptar desde 1974 para la realización que se ajustara a las exigencias técnicas y artísticas de la televisión norteamericana.
Cuando Telemundo y Negro Santos acordaron la transmisión de Santo Domingo Invita durante un mes (cuatro ediciones), este recibió el Manual de Producción con las condiciones y exigencias técnicas que debía cumplir el programa.
“Santo Domingo Invita nació con una misión principal: la promoción del país como destino de turismo enarbolando las bellezas y patrimonios nacionales para generar orgullo en quienes nacieron aquí, y el interés y la admiración en quienes podrían interesarse en visitarnos desde sus países de origen” dice Negro Santos.
Ejemplo: las tomas de los reportajes debían ser todas tomadas con trípode o accesorios estabilizadores, debido a que las tomas “yoleadas” – con movimientos oscilantes sin sentido- eran motivo de rechazo en el proceso de inspección para autorizar la difusión.

También te podría interesar: Como cada domingo: Negro Santos, mi héroe
De igual modo, se establecen criterios en torno al maquillaje, vestuario de talentos y declarantes, iluminación, escenografías, locaciones adecuadas, todo con el riesgo de ser motivo de impedimento de difusión si no se cumplan las propuestas del Manual de Producción, que establecía además condiciones en torno a la tecnología (de cámaras, de edición, de animaciones especiales, y otros aspectos).
Todo ello implicaba para Negro Santos, primero la adquisición de equipo de producción televisiva de vanguardia hasta ese momento, y segundo, la contratación de un equipo humano especializado.