En el debate cada vez más intenso de la reforma fiscal no ha dejado de intrigar la opinión del exdirector de la DGII, Magín Díaz, en el sentido de que es inviable un pacto sobre la materia.
Si bien se apoya en la falta de controles de la evasión, llamó la atención su señalamiento de que en la actual gestión no se ha resuelto un solo problema.
El comentario no venía al caso y de ahí que se interprete que la objeción al pacto fiscal sea una posición más política que técnica.
Díaz expuso que el Gobierno tiene tres décadas con déficit y que la vacuna será dolorosa, por lo que entiende que antes que una reforma sería más conveniente controlar la evasión fiscal.
El pacto que el exdirector de la DGII objeta se aprobó en 2012 y está consignado en la Estrategia Nacional de Desarrollo, que también contempla acuerdos para transformar el sistema educativo y el eléctrico.
En su señalamiento Díaz cita la falta de consenso para el pacto, basado en el rechazo a la reforma expresado por Fuerza del Pueblo y el PLD.
Aunque todavía no ha elaborado el proyecto el Gobierno ha adelantado que con la reforma procura crear las condiciones para sustentar el crecimiento y el desarrollo del país.