El exministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, salió ayer en libertad tras el pago de la fianza de 4 millones 500 mil pesos que le concedió el Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, tribunal que tiene a su cargo el caso de corrupción administrativa denominado Calamar.

Peralta abandonó la cárcel de Najayo, San Cristóbal, a la 5:00 de la tarde, y de inmediato se dirigió a su casa en donde pasó la noche con su familia.

Era el último de los imputados en el caso Calamar, que quedaba en prisión.

Su equipo legal espera que en lo adelante sea desvinculado por completo del caso, puesto que, según ellos, se ha demostrado que las pruebas que el Ministerio Público alega tener en su contra fueron obtenidas de una persona que se contradice en sus declaraciones.

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Pedro Balbuena, Santiago Rodríguez (Chago), Emery Rodríguez y Chanel Liranzo, abogados de Peralta, consideran que la fianza que se le concedió no es suficiente, sino que también debe ser excluido del expediente.

“No basta con el hecho de que ahora se haya variado la medida de coerción disponiendo en cese de la prisión preventiva, sino que lo que corresponde es el cierre definitivo del expediente”, refirieron.

Las declaraciones de los abogados que conformar en Equipo Legal de Peralta se produjeron luego de que la jueza encargada del control del caso en el Segundo Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, Ana Lee Florimón, ordenara la variación de la prisión preventiva por la de una garantía de RD4.5 millones.