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Perplejidades legales

Perplejidades legales

Chiqui Vicioso

No sé nada de leyes. Por razones filiales he acompañado el proceso legal de una casi hija, y he tenido que asistir a la Fiscalía durante cinco reenvíos de un caso que se convertirá en paradigma para toda las mujeres del país.

1.-Hace ya 3 años Mariana (seudónimo) logró, después de quince intentos, divorciarse. Para lograrlo decidió entregar todos sus bienes, algo que su entonces marido aceptó de inmediato.
2.-Por recomendación nuestra, Mariana aceptó lo que manda la ley: que en caso de divorcio los bienes -adquiridos durante el matrimonio-se dividen a la mitad. El ex no tuvo más opción que firmar el divorcio porque los testigos de la firma eran sumamente respetables y su abogado así lo planteó: “Frente a estos testigos hay que acatar la ley”.

3.-El divorcio, como es lógico otorgó la custodia de los hijos a la madre y ahí comenzó una historia de horror inimaginable. La madre cumplió con las primeras vacaciones con el padre de los niños, cubriendo como siempre todos los gastos, y a final de las vacaciones John Wayne (seudónimo) declaró que no los devolvería. Mariana vino al país, apeló a las instancias legales, apresaron al padre, le ordenaron a su abogada que entregara a los niños, y los obligaron a respetar la legislación dominicana.

4.-Desde entonces nadie ha tenido un respiro. Wayne, que así se llama el cowboy de marras, comenzó una guerra psicológica que implicaba llamar a los niños todas las noches y mantenerlos despiertos toda la noche, con ataques y acusaciones feroces contra la madre. Los niños se dormían en la escuela y salvaron el año por el esfuero titánico de tutores y familiares.

5.-Superando lo impensable, Wayne llegó a pedirle a su hijo que intentara suicidarse, lo cual hizo, pero no pudo; se pusiera en huelga de hambre; y por último que matara a la madre, para lo cual el niño cogió un cuchillo y al ver a su madre de rodillas y llorando intentó matarse él, todo bajo la -grabada- supervisión del padre.

6.-Siendo culpable de secuestro, Wayne le puso a Mariana una denuncia de tráfico internacional de menores, que a mi, me hizo reir a mares. Mariana le puso una denuncia por violencia picológica y en ese relajo llevamos ya cinco reenvíos, por tecnicismos insólitos.

El último capítulo fue que Wayne tramitó y perdió una denuncia de abuso infantil a los servicios sociales españoles. Estos entrevistaron a los niños y por fin ellos pudieron declarar su verdad, su amor por la madre, y rechazo a regresar con el padre.

7.-¿Y? ¿Creen uds. que -las juezas- han condenado al psicópata y sociópata? Ingenuidades hostosianas y salomenianas, !Oh Berenice! continúan victimizando a la víctima.