Nicolás Maduro pierde la batalla mediática sobre la crisis tras su reelección en las elecciones en Venezuela. Tal parece que no tiene las actas.

Vendría bien si Abinader detallara con más lujos su encuesta sobre la reforma constitucional. Si no es mucho pedir. ¿No les parece?

Por cierto, parece que quedó en el limbo el consenso entre distintos sectores de que se habló sobre la reforma de la Constitución. ¿Era tan difícil?

Hasta una aliada casi incondicional como la expresidenta argentina Cristina Fernández urge que se presenten las actas. Es mucho decir.

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Lula da Silva busca salvar la imagen de la izquierda con sus gestiones para encontrar una salida a la crisis de Venezuela. El desafío no es poca cosa.

Son tantos los que aspiran sustituir a la procuradora Miriam Germán, que Abinader tendrá que seleccionarlo con la linterna de Diógenes. ¿De acuerdo?

Es perceptible la procedencia de los cambios administrativos que circulan en las redes. Después que Abinader habló los interesados deben esperar.

La Digesett fiscalizará a los conductores que obstaculizan el “paso rápido” de las Américas. Es necesario, así como a los violadores de las leyes. ¿Verdad?