La Fundación Proterra certificó por sexta ocasión consecutiva todas las etapas de labores agrícolas de Central Romana, tras evaluar y demostrar su habilidad para implementar, monitorear y trazar una producción responsable y sostenible, según establecen sus requerimientos de cumplimiento.

La auditoría para esta recertificación del estándar Proterra fue realizada por la firma Foodchain ID y se llevó a cabo de manera presencial durante varios días en la zona agrícola e industrial de Central Romana, en La Romana, así como de los colonos azucareros, determinando que la empresa cumple con el fomento de buenas prácticas para el cultivo de la caña y la producción de azúcar crema, refino y melaza.

“Ante la renovación del certificado de calidad, la Administración de Central Romana enfatizó que sus procesos agrícolas y de producción mantienen el sello de garantía “que establecen las normas internacionales, demostrando el compromiso de responsabilidad que tiene nuestra empresa con sus trabajadores y los consumidores del azúcar que elaboramos”, destacó la compañía en nota de prensa.

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En ese aspecto, el ingenio Central Romana se prepara para el inicio de su nueva zafra a mediados de diciembre 2023, por lo que ha estado inmersa en una serie de reestructuraciones en sus procesos laborales para continuar proporcionando a todos sus trabajadores mejores condiciones dentro del área de trabajo.

Una de éstas ha sido la construcción de dos oficinas de Recursos Humanos en las divisiones agrícolas de Guaymate y Cuyá, además de una dependencia móvil que recorrerá los campos, para brindar todo tipo de apoyo y soporte al personal agrícola en el ejercicio de sus derechos y deberes.

En materia de responsabilidad social, la empresa anunció recientemente que firmó un acuerdo con la administradora de riesgos de salud ARS Abel González para proveer un seguro médico privado a los trabajadores agrícolas que no están amparados bajo el sistema de seguridad social, sin costo alguno para el empleado.

Este seguro médico conlleva una inversión de más de $60 millones de pesos anuales para Central Romana, aparte del programa de salud en atención primaria y servicios de medicina preventiva que la empresa facilita gratuitamente para los familiares de los trabajadores cañeros.