Con caravana

¿Qué pasará?

Al llegar a México y tras desoír las advertencias del presidente Donald Trump, se han disparado las expectativas sobre la caravana de miles de personas que salió de Honduras con el propósito de llegar a Estados Unidos.

La militarización de la frontera con México ni las sanciones económicas a Honduras anunciadas por el mandatario estadounidense han atemorizado a los migrantes en su determinación de romper todas las barreras para alcanzar su objetivo.

El secretario de Estado, Mike Pompeo, se entrevistó sin éxito alguno con el presidente mexicano Enrique Peña Nieto para tratar de impedir que el numeroso flujo de personas avanzara a la frontera entre los dos países.

A las alrededor de 1,500 personas que salieron de Honduras, entre las que se cuentan ancianos y niños, se agregaron cientos de centroamericanos cuando la caravana llegó a El Salvador y Guatemala. Al llegar a México, después de cruzar la valla fronteriza de la ciudad guatemalteca de Tecún Umán, la caravana fue trasladada en autobuses a la estación migratoria Siglo XXI, en Tapachula, la más grande de la nación. Los hondureños aducen que huyen de la miseria y la inseguridad en la nación.

Los dejen entrar o no a Estados Unidos el caso revive el drama migratorio, que tiene en la inseguridad, las desigualdades, la corrupción, la impunidad y los déficits democráticos su principal caldo de cultivo. Frente a este nuevo desafío migratorio al menos Washingto