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Recuerdos ante una situación de la vida real

Recuerdos ante una situación de la vida real

Lo mejor para un autor es no estar asociado, en este caso a la historia que narra, con acuso de recibo para esta novela.
La novela, ganadora de la primera versión del concurso Salvador Gautier, 2022, que organiza el Ateneo Insular con el apoyo de Banresevas y publicada por Bien-etre Editorial, titulada Tibieza, que sin tener nada de tibio, entendiéndose como tibio, algo que se puede sujetar con las manos (esta trama con la cabeza) en su discurrir narratológico de unos recuerdos ante una situación de la vida real, ¿real?, común a determinado modus vivendi, ¿dominicana?… Novela que quiere, a partir de un personaje de ficción, lograr una catarsis tanto de sí misma como de su discurrir y el extracto socio político en que se desenvuelven sus acciones.

La interrogante está abierta, aunque el concepto esté encerrado en signos de interrogación, en lo que se refiere a su trama actual omnisciente.

En los últimos años escritores jóvenes, no ya tan jóvenes, han incursionado en la praxis de la vida ideológica en busca del ascenso social, ganando y perdiendo tanto en el orden divino como en el medio material en que se desenvuelven. Al derrumbarse el castillo, desembocan en condenas morales, primero y segundo, en las consecuencias legales, es decir, la cárcel. Es lo que le sucede al personaje principal de Tibieza.

En esta novela, la número cinco del autor, eso quiero decir que ya es un narrador experimentado, Nan Chevalier nos introduce en los entresijos de una vida fragmentada a partir de lo reminiscente, y todo buen lector sabe que en lo reminiscente también se cuela lo vivido a tiro de canasto. Y me atrevo a decir que, si busca ser ingenuo como lo contrario, no hay manera de que no lo consiga.

Lo anterior incluye sus descripciones, tanto del personaje (en su afán de recordar lo vivido como placer no de arrepentimiento como de las localizaciones (el marco urbano) con sus cargas psicológicas.

Chevalier nos narra en Tibieza un pasaje y no de ida, sino del eterno retorno de la sociedad dominicana en su clase política, sin que necesariamente el personaje principal venga del extracto social que detalla lo narrado con sorna, con nombre y apellido, bastante largo por cierto y que no se esfuerza en ironizarlo, contrario a otros autores del mismo lar nativo, en la técnica hibrida a emplear en el texto, que le da agilidad de lectura cuidadosa.

¿Qué se busca con este tipo de tema (recomiendo leerse la novela), tan recurrente? El espacio no permite citar otras novelas. Pienso que darle un manotazo en la espalda a estos temas, basta, involucrados en círculo dantesco (menor) de esta historia nuestra, pronto a estar en los manuales escolares, con la particularidad de que algunos de esos personajes (los de las novelas) son jueces y partes, que no es el caso de nuestro autor de Tibieza y que viene a traer “malos recuerdos” a quien por accidente se tope con la novela.

Es una práctica interesante que autores de narrativa larga escriban sobre sus propias experiencias recién, tanto del plural como del singular.

Tibieza, galardonada por la unidad de dos instituciones de prestigio, altruista-bancaria, en apoyo de nuestra literatura ya debe ser una fiesta y más que el narrador, poeta y cuentista no sea un bisoño en las lides literarias, ¿por qué no celebrarlo? Un académico y gestor cultural de buena lid, dedicado, con entrega a amarrar las palabras para que el lector las suelte, si puede, en su cabeza.

Con tramas tan de nuestro tiempo que, si busca indignarnos, lo consigue y más con ese título tan sugerente, dirigido al consciente que gusta de ladrarle a la luna, donde nuestra historia, en este caso un izquierdoso dominicano. Militancia que no coge corte, sacudida por la realidad casi a oídos sordos para la sociedad actual, como testimonio de una vida fracasada.

Tibieza no significa ruptura sino continuidad de la labor de un joven narrador, en su labor de oficio de lucidez con un apagón dentro del cuerpo para la escritura. El autor es escritor.

Por: Amable Mejía
amablemejía1@hotmail.com

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