Se deteriora el Carlos Teo Cruz
El ministro de Deportes Francisco Camacho mantiene un alto nivel
de rescate en importantes instalaciones deportivas del país, las cuales encontró en franco deterioro.
¿Por qué él tiene esa gran motivación en su plan de rescate? Pienso
que es porque se trata no sólo de que es ingeniero civil, sino un
dirigente deportivopreocupado por el buen estado de las canchas.
Aún así, no me explico el porqué el ministro de Deportes, no ha girado la cara para atencionar el Coliseo de Boxeo Carlos Teo Cruz.
La importante instalación desde hace muchos años, presenta un deterioro que se podría calificar de final. Allí todo se está destruyendo a un ritmo acelerado.
Hace más de dos años que el Complejo está abierto las 24 horas, porque un bus al servicio del Ministerio de Salud Pública, tumbó la puerta de la entrada por la avenida Tiradentes y todavía permanece como el día del accidente.
Esa entrada abierta las 24 horas permite que decenas de personas
usen el área para cosas indebidas, principalmente por la noche.
Pero eso no es lo peor, solicito al Ministro, una inspección personal,
en su calidad de ingeniero para que compruebe el mal estado del Coliseo.
Su parte frontal, lado sur, el que tenía unos diseños lindísimos alusivos al boxeo, todos han sido rotos por un grupo de jóvenes que pertenecen a una Escuela de Béisbol” que instaló una persona, bajo la protección del cuerpo militar de servicio allí. Ellos tienen sus ‘arreglos’ y el entrenador actúa como dueño del área.
La mayoría de persianas de las oficinas que se ubican hacia ese lado
están rotas. Las áreas sanitarias, ningunas sirven y es vergonzoso
cuando hay actividades.
Da pena mirar a una persona conocida como “Baja” que está al cuidado de la misma, como se esfuerza para higienizar esas áreas y mantener limpio el entorno.
El techo del Coliseo necesita una urgente reparación, de la misma
manera que la unidad del acondicionador de aire que trabaja con
agua.
Importantes áreas del Coliseo están en manos de particulares y debajo de las rampas hay almacenes repletos “no sé de qué”, pero están cerrados con llaves, a pesar de que las puertas están llenas de carcomas.
Es penoso el estado de deterioro y es bueno aclarar, dónde van los fondos de alquileres del Coliseo, así como también los del cobro de parqueos, cuando hay actividades, los cuales son manejados por un oficial superior del Ejército de la República.
Por falta de espacio, no puedo señalar otros males peores, de los que se hace de la vista gorda, el famoso Patronato que lo dirige y para ser justo, excluyo al periodista Joel Adames, quien sufre y batalla por solucionar algunos problemas, pero termina de brazos cruzados, por la impotencia.
Ojalá que el plan de reconstrucción del ministro de Deportes, llegue al Coliseo Carlos Teo Cruz, del ensanche La Fe.
Por: Héctor García
hectorgarciasr@gmail.com