Lejos de estimular a los maestros para que aprovechen la evaluación de desempeño que efectuará el Ministerio de Educación, la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) quiere que la base para los incentivos sea a partir de los 60 puntos.

De esa manera el educador que se esfuerza y sacrifica recibiría el mismo estímulo que quien no se ha ocupado de mejorar sus aptitudes, siempre que el promedio no baje de 60.

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De no ser por el populismo que fomenta la ADP para consolidar su influencia entre los maestros, cualquiera se extrañaría de su aberración. Es posible que Educación, tal vez para evitar conflictos, sea hasta considerada al no establecer una escala más rigurosa para la evaluación docente.

Los incentivos van desde un 17 hasta un 32 %, dependiendo del grado de excelencia. Que no se ceda ante las presiones de la ADP es una buena actitud al respecto.

Resulta importante, sin embargo, que la prueba que se propone la cartera no solo incluirá a los maestros, sino a los directores de centros educativos. Los directores son quienes tienen la responsabilidad de coordinar y supervisar todo lo que tiene que ver con el proceso de enseñanza.