SANTIAGO. La falta de señalizaciones en calles y avenidas y los entaponamientos que provocan las obras viales han llevado al tráfico vehicular de la ciudad al caos.
Las señalizaciones que se suponen deben orientar a los conductores en su desplazamiento, han desaparecido. Otras son tan viejas que no pueden leerse, por lo que suman el mismo resultado para orientar al conductor.
Muchas avenidas de Santiago, como la Circunvalación Yaque, no tienen las líneas blancas o amarillas que separan los carriles, ya sea en la orientación de doble vía como en los carriles que orientan a una misma dirección.
El problema del tránsito se repite en gran parte en las calles y avenidas de la ciudad generando un efecto dominó sobre el tráfico.
En algunos puntos neurálgicos, como la avenida Hispanoamericana, entre la Cruz de Marilópez y Utesa, es común encontrarse con vehículos en vía contraria que agudizan el entaponamiento y ponen en riesgo la vida de todos.

Alex Reynoso
Esa acción es regularmente cometida por clientes y empleados de algunas empresas establecidas en la zona que tratan de evitar el dar la vuelta y entrar a los parqueos desde la parte atrás de esos lugares.
Las constantes violaciones en la zona de no parqueo o de no abordar pasajeros, son otras de las acciones que constantemente complican el normal desenvolvimiento del tránsito.
Sin planificación
Las organizaciones de choferes del transporte público, agrupadas en la Federación Regional de Trabajadores del Transporte (Fettranreno), que orienta Gervasio de la Rosa, señalan como causa de los problemas la falta de planificación en las obras viales que realiza el Gobierno.
En ese sentido, De la Rosa dice que las construcciones del monorriel y el teleférico, sin planificación adecuada, mantiene entaponada las vías de la ciudad, por lo que cree que el Gobierno tiene que dar la cara al problema.
De la Rosa sostuvo que el director de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), general de brigada Ramón Antonio Guzmán Peralta; el ingeniero Mélido Agramonte y la gobernadora provincial Rosa Santos se reunieron y pusieron en marcha un “plan estratégico” con el propósito de optimizar el tránsito vehicular en Santiago y disminuir los accidentes.
Sin embargo, De la Rosa dijo que aún desconocen el plan y la forma de ejecutarse, mientras que los choferes y la población que tienen que desplazase por las vías en sus vehículos están desesperados.