Londres (EFE).- Roger Federer puso en duda su participación en el próximo Abierto de Australia, del cual no se conocen fechas oficiales, y apuntó que le gustaría tener más tiempo para recuperarse de la lesión de rodilla que sufrió a principios de año.
El suizo se tuvo que someter entonces a una artroscopia en la rodilla y ha estado rehabilitándose, sin participar en la reanudación del circuito el pasado mes de agosto.
Ahora, con la posible disputa del Abierto de Australia a principios de febrero -el día 8 parece el día más plausible-, el suizo puso en duda su participación en dicho evento.
“Me encantaría estar en Australia, pero quizás sea demasiado pronto para mi rodilla. No quiero dar el siguiente paso hasta que esté preparado. Estas tres semanas de margen (hasta el 8) pueden ayudarme un poco”, dijo el helvético en la ceremonia previa a los ‘Sports Awards’.
“El verano, con Wimbledon, los Juegos Olímpicos y el US Open debe ser mi prioridad”, añadió el ganador de 20 Grand Slams.