Las investigaciones sobre los actos de corrupción cometidos en el país durante los últimos 16 años desbordan el Ministerio Público, que no tiene los recursos económicos, ni el personal suficiente, profesional y bien formados técnicamente, para investigar y someter a la justicia a todos los involucrados.
Durante esos 16 años, principalmente, la ley fue letra muerta. Los gobiernos del PLD se burlaron de la Constitución y de las leyes para saquear impunemente los recursos del Estado, convirtiéndose en una organización hegemónica que controlaba todos los poderes del del Estado, incluyendo los fácticos. Para los peledeístas no hubo consecuencias. Podían hacer y deshacer libremente sin ser tocados, hasta ahora que existe una voluntad política, una decisión de terminar con la corrupción, sometiendo a la justicia y llevando al banquillo de los acusados a los responsables.
Si el Ministerio Público tuviera los recursos económicos y los fiscales sin ataduras políticas, no habría cárcel donde meter a tanta gente; las medidas de coerción variarían entre prisión, cárcel domiciliaria, impedimento de salida, garantía económica, y finalmente, prisión en Najayo, porque la mayoría de los expedientes serían declarados complejos. Las evidencias, que son las que hablan, serían abrumadoras, irrefutables y por lo tanto irrebatibles.
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Muchos exdirigentes del Partido de la Liberación Dominicana, que ocuparon cargos importantes, no resisten ni siquiera una “auditoria visual” por la cantidad de dinero, propiedades, a su nombre y a nombre de testaferros (los llamados “prestanombres”, que bien pueden ser identificados en investigaciones serias y profundas).
Es necesario continuar con la profilaxis social, terminar con los altos niveles de corrupción que aún persisten en nuestro país, porque, debo decir, no creo que ese flagelo haya terminado, que el cáncer haya sido extirpado. Continúan pues, las “indelicadezas” de muchos funcionarios durante el presente gobierno, claro, en mucho menos medida gracias a la actitud del presidente Luís Abinader y del Ministerio Público que encabeza Mirian Germán, que han demostrado trabajo, capacidad y honestidad en el ejercicio de sus funciones.
Hay que continuar el trabajo de investigación de los hechos de corrupción, sin miedo a las amenazas y al chantaje del PLD. No hay por qué temer, el pueblo apoya al gobierno y al Ministerio Público.