Josué Guerrero es un actor que piensa transforma el mundo. El encuentro con él hace crecer y sentir lo que representa el teatro en tanto ejercicio creativo de transmisión de historias.
“El teatro es más que la magia que se repite una y otra vez para definirlo. Es una fuerza poderosa interior que se expresa exteriormente y nos regala la experiencia vivencial. Inmediatamente se abre telón, ya todos los que vamos a ver la obra nos sentimos parte de ella y es inevitable no vivir las emociones y experiencias que nos van dibujando con la interpretación los actores” expresa.
Explica que es claramente distinto actuar para cine, si se compara con actuar para teatro.
“La gente puede pensar que es simplemente actuar para teatro y cine y ya, se acabó el cuento. No es así. En teatro sientes y exteriorizas. En cine sientes e interiorizas y el lente se encarga de leerte.
El eje de los sentimientos para teatro nace dentro de actor y sale ante quien es su público, ahí mismo. El cine sientes las emociones y las llevas hacia tu interior. Como se ve, es una diferencia abismal” sostiene el artista y profesor de teatro.
Refiere que el ideal para un actor es enfrentarse a retos interpretativos intensos, de los que demandan un proceso de aprehensión de los temperamentos, de los perfiles que manda el autor.
Josué Guerrero señala que esa actitud desafiante se encontró para interpretar a Ramón, el personaje masculino frente a la Amelia, que hace Xiomara Rodríguez, en el montaje de La Golondrina, que ahora se ha fijado para el mes de agosto en la Sala Ravelo del Teatro Nacional.
El montaje
El montaje “La golondrina” que cambió su fecha de estreno para el mes de agosto. Es del autor español Guillem Clua inspirado directamente en el ataque terrorista del bar “Pulse” de Orlando (EE.UU.) en junio de 2016 y que marcó el regreso de la reconocida actriz Carmen Maura en España. Tiene la dirección de Elvira Taveras y actúan Guerrero y Xiomara Rodríguez.
