SANTIAGO.-La Iglesia católica citando un mensaje del papa Francisco advirtió que parece que se está imponiendo la idea de que los pobres no sólo son responsables de su condición, sino que constituyen una carga intolerable para un sistema económico que pone en el centro de los intereses de algunas categorías privilegiadas.

En el editorial del semanario Camino ”Cada día más pobres”, la Iglesia critica el pensar de que los pobres son una carga y que esto tiene claro tinte de exclusión ”y esta visión la encontramos en muchos políticos, y empresarios. Para ellos su dios es el deseo y el poder”

La cita que hace referencia el editorial es el número cinco del mensaje del papa Francisco con motivo de la V Jornada Mundial de los Pobres, celebrada el pasado domingo.

”Se olvidan que las desigualdades sociales generan violencia que se manifiesta en acciones concretas que van quebrantado la paz” apunta el escrito.

Advierte el editorial que circulará el domingo y será leído en todas las iglesias, de que en la medida que se expande la pobreza la convivencia social se deteriora.

”Y estamos observando que la pandemia del Covid-19 ha incrementado el número de personas que sufren esta condición. De ahí la importancia que los recursos económicos que tiene el Estado sean administrados con pulcritud, y así sean utilizados en bien de tantas personas que carecen hasta de lo indispensable para vivir”, señala.

Asimismo, explica el órgano escrito del Arzobispado local que para cumplir esa meta sugiere al Gobierno que haya tolerancia cero frente a cualquier funcionario, no importando su posición dentro del partido oficial, que intente utilizar su cargo para enriquecerse.

”Porque como ha dicho el Sucesor de Pedro: Los pobres no son personas ¨externas¨ a la comunidad, sino somos hermanos y hermanas con los cuales compartir el sufrimiento para aliviar su malestar y marginación, para devolverles la dignidad pérdida y asegurarles la necesaria inclusión social. La limosna es ocasional, mientras que el compartir es duradero”

Puntualizó que la República Dominicana necesita funcionarios honestos que entiendan que a los puestos públicos se va a servir, no a servirse. ”Tengamos presente que la pobreza no se elimina con dádivas”.