Articulistas

Libros y lecturas

Libros y lecturas

Portada del libro

Charamicos, de Angela Hernández
Título: Charamicos, Autora: Angela Hernández Núñez; Edición: AGN; Año: 2021; Páginas: 629; Arte de portada: Miguel Ramírez; Diagramación y diseño general: Rafael Rolando Delmonte; Editor: Daniel García, Encargado área publicaciones del AGN; Impresión y terminación: Editora Corripio.

Las novelas históricas tienen su encanto: juegan con la realidad y la ficcion y dejan testimonios que en oportunidades son tan valiosas como los documentos históricos. Es el caso de Charamicos (Angela Hernández, 2021, Archivo General de la Nación) es un brillante y valiente ejercicio de alta literatura, es lección de historia reciente y revisión dialéctica de los excesos de izquierdas y la represión del poder conservador con sus señales de sangre, luto y dolor, los gestos de heroísmo y irrenunciable lucha por la libertad. Pudo haber sido una crónica de los vencidos, pero no lo es.

La obra de Hernández resuelve de forma muy singular la borrosa y a veces imperceptible línea, que separa la realidad de la ficción, sobre todo cuando de novelas históricas se trata.

Charamicos es un desfile-homenaje crítico a una galería de personajes: (El hombre brújula (Francisco Alberto Caamaño), El Canelo (El Moreno), Aridio Ormelo (Amaury Germán Aristy), Los Ciguayos (Movimiento 12 de enero, Los Palmeros), Dona Manuelita (Manuela Germán Aristy. EPD) -entrevistada por la autora para esta obra-, principales dirigentes y líderes operativo de grupo de izquierda), Andrickon, Peñaló, Estrella Roja (nominación para definir uno de los grupos de izquierda); La Gamba (La Banda liderada por Ramón Pérez Martínez (Macorís), recientemente fallecido) y Jimmy María (el orientador), entre algunos de los nombres de esta galería de nombrables e innombrables, muchos de los cuales finalmente se aburguesaron y pasaron a los bandos políticos de derecha que para la época descrita combatieron.

Hernández logra ubicarse en el difícil equilibrio entre la ficción, la imaginación fluida, la validez de los recuerdos, la documentación a que apela y la subjetiva expresividad que delega en sus dos personajes femeninos narrativos (recurso al que ha recurrido en casi toda su narrativa breve y de largo esfuerzo) en las personas de Ercira Sánchez (La Sureña) y Trinidad, dos mujeres jóvenes que enhebran cual canal conductual de hechos reales o ficcionados.

Charamicos era una novela que la autora se debía a sí misma, en sus 629 páginas expone con valentía de exponer los hechos, alejándose de los rituales de lo políticamente correcto, desmontando altares y evidenciando errores y horrores de lo tenido hasta ahora como incuestionable proceder político de izquierdas y derechas, sin caer en la tentación de ser crónica de los vencidos.

Los principales logros estilísticos de la autora: descripción al detalle de personajes y personalidades, ajustada visión subjetiva de las dos narradoras y el trabajo documental y de memoria al reconstruir los ambientes ámbitos de la acción. Es notable el sentido sarcástico del humor y la gestión del lenguaje popular.