La estrella eslovena Luka Donciç, resaltó este sábado, tras la victoria de Eslovenia frente a Venezuela por 100-85 en el Mundial de Japón, Filipinas e Indonesia, que el conjunto sabía “que no sería un partido fácil”.

“Sabíamos que no sería un partido fácil, porque ya habíamos jugado contra Venezuela hace dos años y sabemos que es un equipo físico, luchador y, sobre todo, muy certero al principio del partido”, afirmó.

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Donciç, que fue el motor del combinado esloveno con 37 puntos y 39 de valoración añadió: “Luchamos hasta el final y conseguimos una primera victoria importante. Aunque anotamos 51 puntos en el descanso y 85 al final, nuestra defensa no fue tan mala”.

Asimismo, el entrenador de los campeones europeos 2017, Aleksander Sekulic, mencionó la importancia de saber adaptase a las necesidades que exige el propio juego: “Cuando ajustamos nuestra defensa, el porcentaje de tiros bajó y la diferencia en el marcador subió. El hecho de que supiéramos adaptarnos es para mí la lección más importante del partido”.