¿Qué Pasa?

Manerra se va con su música a otros escenarios

Manerra se va con su música a otros escenarios

Santo Domingo.- El cantautor dominicano Manerra se ha ido abriendo paso sin el ruido mediático de moda hoy día. No ha necesitado de situaciones provocadas para insuflar sus redes sociales en procura de pescar en el sinuoso mar de los likes y los views.

Su propuesta la ha sustentando en la calidad, la persistencia y el denodado respeto por una profesión hoy suplantada por pigmeos del proxenetismo musical.

El pasado viernes quedó claro en Chao Café Teatro que con su novedosa oferta musical ha conquistado a un público afiliado al buen gusto, que cantó a todo pulmón sus canciones desde el inicio hasta el final.

Un repertorio de merengues, boleros, bachatas, samba y jazz fue acompañado de las anécdotas inagotables de Manerra, quien hizo reír y llorar a un público que conectó con sus historias.

Manerra se va con su música a otros escenarios
Manerra se va con su música a otros escenarios

El intérprete de la infaltable Bachata colonial, ahora muestra otra joya como ésta con el título de Santiaguera bonita, una canción que las estaciones radiales se prestigiarían en difundir.

“Se trata de una historia de amor que se desarrolla en la ciudad de Santiago de los Caballeros, una bachata fusionada con son, chachachá y progresiones armónicas de jazz”, destaca Manerra.

En el tema cuenta con la participación de la cuatrista boricua Fabiola Méndez, la venezolana Constanza Liz y Álvaro Dinzey en los coros.

Dice es un reconocimiento a la ciudad de Santiago, donde aprendió a leer y a escribir. “Llevo tantos recuerdos en mi mente, es mi tierra amada y quiero honrarla con esta canción”.

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El concierto en Chao pautó el inicio del periplo “Mantequilla y café tour”, nombre de una de sus canciones, con el que, además de recorrer escenarios convencionales por todo el país llegará a orfanatos, asilos, colegios y escuelas.

La intención es conversar con los jóvenes, visitar niños y ancianos, algo que está trabajando desde hace mucho tiempo.

“Es algo que siempre he guardado en el corazón. Desde niño en actividades de la iglesia iba a esos centros y me daba cuenta de la felicidad que provocaba el solo hecho de ir a visitarles, luego cantarles y pasar tiempo con ellos”, explica.

El cantautor destaca que estos conciertos le llenan el alma y “son las cosas que vi a mis padres hacer desde que era un niño y este es el momento de hacerlo como una manera de devolver todas las bendiciones que hemos recibido”.