kurt helin

NBC Sports

“Es tiempo de irse.”

Ese es el tipo de declaración confiada y optimista que esperarías de alguien que acaba de firmar una extensión de contrato por cuatro años y $224 millones. Pero para Karl-Anthony Towns para decirlo el viernes en Minnesota todavía tenía peso: no ha sido “momento de ir” para los Timberwolves en mucho tiempo.

Con Towns encerrado, Anthony Edwards en ascenso, y ahora Rudy Gobert en la lista, este podría ser el mejor equipo de los Timberwolves en mucho tiempo. Tal vez alguna vez Towns reconoce eso y se inclinó fuertemente hacia la perspectiva optimista.

“Esto es todo”, dijo Towns. “El intercambio sucedió. No hay más tiempo, no hay más excusas. Tenemos que hacerlo ahora. Así que voy a salir y, ya sabes, es el campeonato ahora o el fracaso, así que tengo que salir y hacer el trabajo”.

Towns habló en una conferencia de prensa para anunciar oficialmente su firma de una extensión máxima (que tiene una opción de jugador en el último año). Sin embargo, gran parte de la atención se centró en su encaje con Gobert, dos de los centros de élite de la liga en un concepto de torres gemelas. Si bien la mayor parte de la NBA se inclina hacia el espacio y el ritmo de la “bola pequeña”, los Timberwolves se han vuelto grandes.

“Sus fortalezas son mis debilidades y sus debilidades son mis fortalezas”, dijo Towns. “Entonces podremos jugar uno contra el otro”.

Towns prevé una ofensiva que será difícil de detener.

“Un pick and roll de cuatro/cinco, tendrás que protegernos a los dos”, dijo Towns sobre sí mismo y Gobert. “Ant es el ala que espera que salga esa patada. Ahora tiene un mano a mano contra cualquiera que no tenga protección de pintura, por lo que podría verse muy bien para él”.

Es el nivel de habilidad y la versatilidad de Towns como gran hombre lo que hará que funcione, dijo el entrenador Chris Finch .

Puedes leer: Karl Towns se destaca entre los mejores hombres grandes de la NBA

“Bueno, creo que la belleza del juego de Karl es que no es unidimensional. Él no es bidimensional. Es un jugador multidimensional”, dijo Finch. “Creo que hay aspectos de su juego que aún podemos desbloquear, moverlos en diferentes puntos de la cancha, tal vez ponerlo en acciones en las que las personas de su tamaño generalmente no están, ese es un lujo que tenemos. Es la parte divertida donde piensas en lo que podríamos hacer allí. Sabes, defensivamente vamos a tener que ser un poco creativos”.

Este tipo de eventos, especialmente durante la mitad de la temporada baja, es un terreno fértil para plantar semillas de optimismo y altas expectativas. La dura realidad de los juegos, con sus victorias y derrotas y sus debilidades expuestas, está a meses de distancia. Towns estaba plantando esas semillas optimistas cada vez que tenía la oportunidad.

“Espero mucho ganar con seguridad…”, dijo Towns sobre jugar con Gobert. “No estoy aquí solo echando humo. Tengo muchas ganas de intentar traer la carrera por el campeonato aquí a Minnesota y creo que Rudy agrega un gran componente a eso. Ya sabes, va a ser una parte importante de que seamos un equipo campeón”.

Towns también señaló la experiencia de playoffs de los jóvenes Timberwolves contra los Grizzlies, a pesar de que perdieron la serie de primera ronda, como un trampolín.

“Creo que la última serie de playoffs fue realmente buena para nosotros porque nos dio mucha experiencia”, dijo Towns. “Tuvimos un grupo de jóvenes Jaden [McDaniels] yjaylen nowell, Nas [Reid], todos obtuvieron mucha experiencia de eso. Entendí lo que el entrenador Finch predicaba todos los días sobre las pequeñas cosas que se suman cuando necesitamos las victorias”.

Si bien alejarse del norte de $200 millones parece difícil de comprender ahora, esta extensión estaba lejos de ser un bloqueo, incluso hace solo un año.