San Juan se vistió de gala para recibir la presentación de la Antología de poesía «Aliento de canela y sal», compilada por el escritor y periodista Nicolás Mateo, una obra que captura la esencia vibrante y profunda de los poetas locales. Este acontecimiento no sólo resalta la riqueza literaria de esa provincia del sur, sino, que también celebra la vitalidad cultural de una comunidad que continúa cultivando el arte de la palabra con pasión y compromiso.

«Aliento de canela y sal» trasciende su condición de simple compendio de poemas; es un verdadero testimonio del alma de San Juan. En cada página, los poetas plasman las montañas, y las emociones que alimentan su tierra natal. Cada verso es una expresión sincera de amor, pérdida, lucha y esperanza, reflejando la profundidad del pensamiento y la sensibilidad de sus autores.

Esta publicación es un merecido homenaje a la labor de los poetas locales, quienes con su talento han logrado que la poesía sanjuanera cruce fronteras, llevando las historias y vivencias de su tierra a un público más amplio. Es un recordatorio del poder de la literatura como vehículo de expresión de lo local en un mundo cada vez más globalizado.

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En una época marcada por la introspección sobre la muerte, la historia, la espiritualidad y el destino, los poetas de «Aliento de canela y sal» nos invitan a reflexionar y conectar con las verdades más profundas de la existencia. Su obra es un regalo de conciencia y pertenencia, una celebración de la cultura sanjuanera que merece ser apreciada.

Así, la Antología «Aliento de canela y sal» se erige como un monumento literario que no sólo resonará en el corazón de quienes la lean, sino que también enaltece el espíritu de una comunidad orgullosa de su legado poético.

Las voces femeninas en “Aliento de canela y sal”.

La importancia de cuatro poetas oriundas de la ciudad de San Juan en la «Antología de autores sanjuaneros 2024» radica en la riqueza y diversidad de sus contribuciones poéticas, las cuales no sólo reflejan la realidad dominicana, sino que también exploran aspectos universales de la condición humana.

Yuniris Ramírez, se distingue por una poesía introspectiva y filosófica que aborda temas como la existencia, la lucha interna y la naturaleza humana. Su enfoque en situaciones cotidianas y emociones complejas, junto a una estructura poética libre, permite una expresión profunda de la realidad individual y colectiva.

Fania Herrera ofrece una obra poética que abarca desde la memoria y la identidad hasta la crítica social y la contemplación de la naturaleza. Sus poemas revelan una profunda preocupación por el tiempo, la condición humana y la cultura afrodescendiente, destacando su capacidad para abordar tanto la belleza como la tragedia de la vida, como en su conmovedor poema «Agua de mar», que aborda la crisis de los refugiados. Herrera logra entrelazar lo personal con lo universal.

María del Pilar se caracteriza por su sensibilidad hacia las emociones más íntimas y cotidianas, explorando temas como el amor, la pérdida y la resiliencia. Su poesía, cargada de simbolismo y con una conexión emocional directa, nos recuerda la fuerza de la voluntad humana frente a las adversidades. Esta poeta ofrece una perspectiva sobre la identidad y la memoria, abordando estos temas con una mezcla de ternura y fortaleza que resuena en la vida cotidiana.

Grisel Lerebours lleva la poesía a un espacio de lucha y denuncia social. Sus obras, marcadas por la introspección, exploran la violencia, la injusticia y la resistencia. Lerebours utiliza su poesía como un medio para confrontar realidades difíciles, especialmente en «Espejo roto» y «Carla Massiel», donde aborda la violencia contra las mujeres y la vulnerabilidad infantil. Su compromiso con la justicia social se refleja en cada verso, haciendo de su obra una herramienta poderosa para despertar conciencias y promover el cambio.

El autor es escritor e ingeniero.

Por: José Enrique Méndez
Ike_mendez@yahoo.com