Articulistas

A votar por Guido

A votar por Guido

Danilo Cruz Pichardo

El doctor Guido Gómez Mazara, aspirante presidencial del PRM, dio cátedras políticas en entrevista reciente que dio en un espacio de la televisión nacional.

 Las principales fuerzas políticas han estado en disputa por el apoyo de los empresarios, las iglesias y  Estados Unidos. A los empresarios y a las iglesias hay que escucharlos, porque tienen sus espacios. Y Estados Unidos es nuestro principal socio comercial.

Pero nada de eso conlleva a la genuflexión de un gobernante, llegando al extremo de permitir que los empresarios impongan al gobernador del Banco Central.

Tanto en el PLD como en el PRD hoy PRM) se perdieron los principios que levantaron sus extintos líderes. Por suerte en el PRM tenemos a Guido, carismático y con discurso liberal.

Los gobiernos del PLD dieron pruebas de ser corruptos, pero ninguno fue tan entreguista con los ricos como Abinader, pues nunca los empresarios ocuparon directamente los principales cargos, reservados para dirigentes y técnicos de los partidos.

Algo más: en el PRM se excluyen de los organismos a dirigentes históricos y con formación y se suplantan por  empresarios trepadores y faranduleros oportunistas, en una franca arrabalización de esa organización.

El PRM se desvinculó de la Internacional Socialista, nadie habla de Social democracia y carece de escuela de formación política. Abinader procura imponer su carácter de ultaderecha.

Algunos lisonjeros pretenden justificar diciendo que es bien intencionado y transparente. Si fuera bien intencionado gobernaría para todos.  Y si fuese tan transparente no insistiera tanto por las alianzas público-privadas ni los fideicomisos, mecanismos mediante los cuales se sustraen patrimonios  para entregar al sector privado.

Abinader se comprometió  con las tres causales, porque su base de apoyo estuvo en la franja liberal. El Código sigue dando tumbos, pronto estaremos en campaña y respecto a las causales las iglesias deciden, a pesar de ser un aspecto científico.

 A los ricos no les importa el problema de las causales, pues embarazos no deseados de hijas y nietas  los resuelven fuera del país. La prohibición de abortos especiales solo perjudica a los pobres.

Ninguna clínica ni hospital se atreve a tratar esos casos y las damas están condenadas a morir. Un verdadero crimen permitido por un gobernante conservador. Hay que  votar por Guido.